Miquel Iceta intentó mediar para evitar que la policía cargara contra los votantes que participaron en el referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017 en Cataluña. El líder del PSC ha reconocido que llamó a la entonces vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, esa misma mañana para pedirle que retirara a las fuerzas del orden de los colegios electorales.
"Era tan obvio que aquello no se tendría que haber hecho nunca, y que tendría efectos muy negativos sobre la imagen de España y sobre la propia convivencia, que yo creo que cualquier persona sensata tenía que hacer lo que hice yo", ha manifestado Iceta a TV3. "También me consta que el PSOE hizo gestiones en el mismo sentido", ha explicado.
"Error político gravísimo"
El líder del PSC ha reconocido que telefoneó a Santamaría para decirle que estaban cometiendo "un error político gravísimo", y expresarle su malestar por las cargas, al considerarlas fuera de lugar y de "una desproporción muy grave".
Asimismo, le advirtió de que su partido tenía preparado un comunicado "muy duro" para hacer públicos tanto su rechazo como la solicitud formulada al Gobierno. "Ante de hacerlo público, la llamé", ha indicado.
"No tenía ninguna validez"
Iceta desconoce si su llamada tuvo alguna influencia en la decisión del Gobierno de evitar las cargas policiales aquella tarde. Y ha desmentido una información de 'Público', según la cual llegó a amenazar con acudir a votar junto al PSC si no se detenían las cargas. Este punto lo ha negado.
"Yo creo que el Gobierno era consciente que las cosas no estaban yendo, ni mucho menos, como debían. Fue un error. No solo se tardó en reaccionar, es que se equivocaron. Ese referéndum no tenía ninguna validez. Por tanto, no tenía ningún sentido tratar de impedirlo", ha añadido.