El dispositivo policial para afrontar las movilizaciones del primer aniversario del 1-O ha generado fuertes críticas en el seno de los Mossos d'Esquadra. Una de las más contundentes procede de la asociación 'Unió de Mossos per la Constitució' (UMC), que entre otras cuestiones lamenta la falta de efectivos para garantizar la seguridad en una jornada de alta tensión como la de ayer, la utilización política del cuerpo, y las "irresponsables" declaraciones del presidente de la Generalitat, Quim Torra, por haber alentado las acciones de los autodenominados Comités de Defensa de la República (CDR).
En un contundente comunicado, los Mossos constitucionalistas consideran "inadmisible la incapacidad" del Departamento de Interior de la Generalitat para asegurar la protección de la ciudadanía de Cataluña durante un día en el que se "vivió un nuevo episodio de violencia y ataque contra su democracia".
"No llegaban órdenes"
UMC denuncia que el dispositivo de los Mossos fue "incomprensiblemente insuficiente, con escasos equipos antidisturbios movilizados por el territorio, que junto a compañeros de Seguridad Ciudadana sin material adecuado y sin formación ni experiencia en faenas de orden público, aguantaron la violencia de grupos perfectamente coordinados, mientras los agentes esperaban una orden para poder actuar que nunca llegaba".
Para esta asociación, resulta especialmente grave el hecho de que Quim Torra calificara públicamente de "amigos" a los CDR y alentara así "a determinados colectivos violentos a 'seguir apretando'". Unas palabras, a su juicio, "impropias" de su cargo y que consideran "de una gran irresponsabilidad".
32 agentes heridos
Para UMC, todo ello tuvo como consecuencia "innumerables vías de comunicación cortadas, asaltos a edificios públicos, ataques a medios de comunicación, ciudades colapsadas, colegios cerrados y un intolerable intento de ocupación a la institución básica de la democracia en Cataluña: el Parlament. Y lo que es peor: 32 agentes heridos, varios hospitalizados, como el compañero al que le lanzaron una valla a la cara".
Los mossos constitucionalistas denuncian en su comunicado que los agentes son, ante todo, "personas que tienen familias e hijos, y que están siendo utilizados como instrumento político, poniendo en peligro sus vidas y en consecuencia la seguridad y las libertades de todos los ciudadanos.
Exigen "respeto"
UMC agradece en su nota "a los cientos de compañeros que viendo la situación de desborde general y la pasividad de la administración" para solucionar el problema, "suspendieron sus jornadas de descanso y sus vacaciones y se presentaron voluntariamente en las comisarias para prestar sus servicios, ayuda que en la mayoría de casos fueron rechazadas".
Asimismo, felicitan al Área Regional de Recursos Operativos (ARRO), a la Brigada Móvil (BRIMO) y "a los miles de agentes de Seguridad Ciudadana que supieron trabajar juntos como un gran equipo para garantizar un estado de derecho que en el día de ayer una jauría violenta quiso poner en peligro". Y concluyen su comunicado exigiendo "respeto" de "nuestros representantes políticos hacia nuestro trabajo", y hacia todos los agentes.