Carles Puigdemont, el expresident de la Generalitat, se ha mostrado "decepcionado" ya que considera "evidente" que la Unión Europea "no apoya la causa" independentista. Ha mencionado que a pesar de sus continuas llamadas a las instituciones europeas para que pudieran desarrollar un papel de mediación entre el Gobierno español y el Govern.
"Es evidente que la Unión Europea, las instituciones europeas, no han apoyado la causa catalana. Lo que critico, mi decepción no es en relación a la independencia, sino que callen en relación a los Derechos fundamentales", ha comentado Puigdemont.
Llamada a Tusk
Ha vuelto a reiterar que la crisis en Cataluña no es solo un asunto interno, ha afirmado que también es un problema "europeo". No ha considerado su fuga como "caótica" y además, ha reivindicado sus viajes por Europa porque le ha permitido internacionalizar el conflicto.
Ha insistido otra vez con volver a llamar al presidente del Consejo europeo, el conservador Donald Tusk. Puigdemont desea que medie en el conflicto catalán. Hasta el momento ningún líder en el plano europeo ha querido responsabilizarse de la problemática al considerar que se trata de una cuestión interna de España.
Censura expresa
Ha lamentado que tras referéndum ilegal del 1 de octubre y con la consiguiente respuesta policial para impedirlo no hubiera una censura expresa por parte de la Unión Europea.
En respuesta a la pregunta de si también ha existido violencia política por parte del Govern y los partidos separatistas contra la otra parte de la sociedad catalana, contraria a la independencia, Puigdemont ha negado tal afirmación y ha manifestado que solo han utilizado "instrumentos democráticos y no violentos".