La polémica diputada del PP Celia Villalobos fue cazada ayer por las cámaras de televisoión en plena sesión de control del Gobierno mientras compraba ropa con su tableta en tiendas como Zara. Es la segunda vez que es fotografiada en su escaño en tareas ajenas a la cámara. Hace cinco años fue pillada jugando una partida de Candy Crush desde su asiento de vicepresidenta de la Cámara.
Se da la circunstancia de que cuando fue sorprendida de compras Villalobos acababa de criticar ferozmente a la ministra Dolores Delgado por estar de conversación con una compañera de Gabinete mientras una diputada del PP se estaba dirigiendo a ella en relación a las grabaciones del excomisario Villarejo.
"Lo que me da la gana"
Reporteros de La Sexta se pusieron en contacto con ella, que sin admitir los hechos les dijo: "Yo he hecho lo que me ha dado la gana". También preguntó a los periodistas si la iban "a perseguir hasta que me muera" y que todo se trata de "una campañita" contra ella.
"Yo ya no soy nadie, estoy muy tranquilita, muy a gustito, déjenme en paz", les dijo, según la cadena.
Un paso atrás
A finales de agosto, el PP relevó a la exministra de su puesto de miembro titular en la Diputación Permanente del Congreso, donde llevaba casi 30 años.
Se da la circunstancia de que Pablo Casado, el nuevo presidente del PP, ha prescindico de los servicios de su marido, Pedro Arriola, que durante décadas ha sido el sociólogo asesor del presidente del partido.