Una historia con final feliz ha sacudido hoy las redes sociales. Ricard, un pensionista catalán de 69 años que llevaba un mes durmiendo en las calles de Barcelona, ha encontrado por fin una habitación de alquiler a un precio asequible y ha podido salir de la situación de precariedad en la que se encontraba.
Lo destacable del caso es que la solución a la situación del sintecho no ha llegado a través de los servicios sociales del ayuntamiento presidido por Ada Colau --cuya popularidad explotó desde su liderazgo de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH)-- sino gracias a la solidaridad de los internautas, animados por el conocido y polémico activista rumano Lagarder Danciu.
500 euros al mes para sobrevivir
Ricard contaba su historia hace 24 horas mediante un vídeo distribuido a través de Twitter. Un SOS desesperado que lanzaba con un cartel en sus manos que rezaba: "Pensionista busca habitación en Barcelona. Puede pagar hasta 200 euros".
"Soy pensionista, tengo una pensión de 600 euros, pero le tengo que dar 100 euros a la Seguridad Social de una deuda antigua, entonces me quedan 500 euros para vivir. Necesito una habitación, un lugar donde alojarme. Anteriormente he tenido negocios, me vino la crisis y todo se ha hundido. Y ahora me encuentro con una pequeña pensión y no puedo llegar a todos los gastos. Nada más. Agradeceré a cualquier persona que me ayude", señalaba en un mensaje de poco más de medio minuto.
Imposible encontrar una habitación por 200 euros
Según explicó Danciu, Ricard trabajó en una empresa de venta de coches en Barcelona, siempre como autónomo. Pero ahora estaba en la calle y con una parte de su modesta pensión embargada.
A pesar de su intensa búsqueda, no encontró a nadie que le alquilara una habitación por 200 euros al mes, lo máximo que puede pagar para poder sobrevivir. La burbuja del alquiler en Barcelona ha disparado los precios de las habitaciones. Así que el activista, al conocer el caso, decidió echarle una mano.
Solidaridad
"Ricard es un pensionista catalán que ha cumplido de sobra con la sociedad. ¿Cómo es posible que duerma en la calle? Los políticos sois servidores del pueblo y debéis servir. Os debería dar vergüenza por permitir que esto suceda en pleno siglo XXI", lamentó Danciu.
Pero poco después se congratuló por la gran cantidad de mensajes de solidaridad con Ricard que estaba recibiendo. "Es impresionante la capacidad de solidaridad del pueblo. Estoy seguro que a este ritmo pronto vamos a encontrar una habitación. Una sociedad que desprecia a sus pensionistas es una sociedad mediocre", indicó.
Eva, la salvadora
Horas después anunció que una mujer había respondido a su llamada: "Buenas noticias: Eva (@xmas14122007) catalana solidaria se ha ofrecido a compartir su hogar con Ricard. Esta tarde iremos a ver la habitación. Con gente como Eva este mundo sería más justo y menos violento con nuestros pensionistas. Seguiré informando".
Poco después, Danciu colgaba un vídeo en el que aparecían Ricard y Eva en el domicilio de esta que daba testimonio del final feliz de la historia. El jubilado se quejaba además de las trabas burocráticas que le habían puesto los servicios sociales del Ayuntamiento de Barcelona. "Para mí, Eva ha sido una bendición", concluía Ricard.