Nueva polémica en la escuela pública catalana a raíz del uso del español. Al menos un centro de la región pide a los padres castellanohablantes que acudan a las reuniones con los profesores acompañados de un traductor, siempre que no entiendan el catalán. Se trata del CEIP Marià Fortuny de Reus (Tarragona).
Las redes sociales arden después de que la Asamblea por una Escuela Bilingüe de Cataluña (AEB) haya compartido en Twitter la guía que el colegio de Reus repartió a los padres con motivo del curso escolar 2017-18, que se repite en el 2018-19.
Avisar al tutor
En uno de los puntos recuerda que las entrevistas con los profesores "son fundamentales". Y aclara: "Si no habláis o entendéis el catalán hace falta que asistáis a la entrevista acompañados de una persona que pueda traducir". Si ello no fuera posible, hay que informar al tutor.
Guía para padres de alumnos del colegio Marià Fortuny de Reus, que pide un traductor para los padres castellanohablantes
Queda claro de este modo que los profesores hablarán con los padres exclusivamente en catalán, lo entiendan o no, aunque sus interlocutores se sientan más cómodos hablando en español. En el mejor de los casos, podría producirse una conversación en las dos lenguas, siempre que las dos partes las entiendan. Huelga decir que el español es lengua cooficial en Cataluña.
El 25% de las horas
A raíz de esta publicación, otros usuarios de Twitter han compartido una guía parecida de otro colegio, que posteriormente ha desmentido la información.
En los últimos meses de su gobierno, el PP anunció que estudiaría cómo implementar el castellano como lengua vehicular en las escuelas catalanas, en cumplimiento de las sentencias del Tribunal Constitucional y del Tribunal Supremo, que fijaron en un 25% de horas las que había que impartir materias en la lengua de Cervantes en los colegios de Cataluña, para evitar una enseñanza monolingüe en una región que cuenta con las dos lenguas como oficiales.
Casi nadie cumple
La realidad, sin embargo, es que solo el 0,35% de los centros públicos (una docena del total) de infantil y primaria y de secundaria, y a petición de algunas familias, cumple con esta medida. Así es, al menos, desde el curso 2014-15 en algunos centros de Castelldefels, Sant Cugat, Balaguer, Tarragona, Cunit, Salou, Sabadell, Vilanova i la Geltrú, Barcelona y Sant Fost de Campsentenlles. Las denuncias por adoctrinamiento son aparte.