Decenas de miles de personas se concentran desde primera hora de la tarde en la Avenida de la Diagonal de Barcelona para participar en la manifestación independentista con motivo de la Diada.
El acto de este año ha sido organizado por la Assemblea Nacional Catalana (ANC) --por séptima ocasión consecutiva-- junto a Òmnium Cultural con el apoyo del Govern y se ha convocado con el lema "Fem la República catalana" ("Hagamos la República catalana").
"Gran ola" humana sonora
La concentración culminará a las 17.14 horas. En ese momento, los participantes guardarán silencio y se dará inicio a "una gran ola" humana sonora que comenzará en el cruce con la calle Castillejos y que avanzará varios kilómetros hasta el Palacio Real.
Allí, la "ola" derrumbará un muro con el objetivo de "hacer efectivo el mandato del 1 de octubre" y para exigir la libertad de los dirigentes políticos en prisión preventiva por su participación en el referéndum secesionista ilegal del 1-O. En esa zona también tendrán lugar los discursos políticos.
"Adversidades y dificultades"
El muro llevará ilustraciones inspiradas en el 1-O que simbolizan "todas las adversidades y dificultades que impiden que Cataluña pueda ser un Estado independiente en forma de república", según ha explicado la ANC.
Este gesto está inspirado en otros momentos de la historia contemporánea occidental, "donde la persistencia y la fuerza popular han hecho caer muros en favor de la libertad", han indicado.
"Directos a la cima"
Como es habitual en este tipo de movilizaciones, miles de participantes han ido situándose temprano en su lugar mostrando esteladas y todo tipo de simbología independentista además de la camiseta que la entidad ha comercializado este 2018: una pieza de color rosa coral con un dibujo del monte Pedraforca y el mensaje "Directes al cim" ("Directos a la cima").
Según los organizadores, hay 460.000 personas inscritas que se reparten por los 38 tramos del recorrido, han contratado 1.500 autocares procedentes de diversos puntos de Cataluña y han vendido 270.000 camisetas reivindicativas para la ocasión.