Sociedad Civil Catalana (SCC), entidad contraria a la independencia de Cataluña, habilitará en los próximos días un servicio de atención jurídica dirigido a las personas que quitan lazos amarillos. Asimismo, ofrece una línea telefónica para atender a quienes creen que sus derechos están siendo vulnerados por el procés.
“Estamos preocupados por la actitud del presidente Quim Torra, que utiliza a los Mossos con una finalidad política, pues les da instrucciones para identificar a quienes retiran lazos amarillos. Es extremadamente grave”, ha dicho el presidente de SCC, José Rosiñol.
Ha asegurado que hay muchos ciudadanos que se sienten desamparados ante esta actitud, así como de determinados ayuntamientos. Se ha referido concretamente al caso de Vic (Barcelona), donde el Consistorio recuerda a diario por altavoz la existencia de independentistas presos. "Se está pervirtiendo la democracia", ha dicho. En este sentido, el vicepresidente de Sociedad Civil, Álex Ramos, ha calificado de "acto pseudoreligioso" la iniciativa del Ayuntamiento de Vic.
Por ello, “el gabinete jurídico Cremades-Calvo Sotelo se ha puesto en contacto con SCC para dar una respuesta a estas situaciones de forma desinteresada”, ha explicado Rosiñol. El abogado Óscar Arredondo, miembro de este despacho, ha asegurado que quitar o poner lazos, según la Ley de Seguridad Ciudadana, "no es delito".
El portazo de la ANC
Asimismo la entidad habilitará “una línea de atención telefónica respecto a estas situaciones arbitrarias, sea la identificación de quienes quitan lazos, sea la vulneración de los derechos lingüísticos".
“Queremos crear un clima de concordia y convivencia y solicitamos”, ha dicho el presidente de SCC. Por ello, ha insistido en la necesidad de una reunión con las entidades independentistas Assemblea Nacional Catalana (ANC) y Òmnium. Sin embargo, la ANC ha puesto como condición “que pidamos la liberación de los presos independentistas, algo que no podemos hacer porque”.
Rosiñol, ante la próxima conferencia de Torra, ha avisado de que SCC adoptará medidas si “se vuelve a cometer el golpe de estado que se cometió el año pasado”. También ha hecho un llamamiento al presidente del Gobierno español para que esté "muy atento, para que no nos dejen solos". Y ha avisado del auge de populismos y nacionalismos en Europa.