"Llevamos 40 años sufriendo la amenaza de la violencia política, sufriéndola o siendo señalados como instigadores. Sabemos que callar y resignarnos no es una opción para este país. Por todo eso politizamos el 17 de agosto. Nadie amordaza a Barcelona". Este es el mensaje que Jordi Graupera, aspirante a candidato a la alcaldía de Barcelona, ha lanzado en un artículo de opinión publicado por El Nacional. A pesar de los llamamientos de las víctimas del atentado y de diversas instituciones a separar la reivindicación política de la celebración del primer aniversario de la matanza yihadista cometida en Barcelona y Cambrils, Graupera arremete contra la neutralidad de la alcaldesa Ada Colau

"Bajo la pretendida neutralidad del acto se encuentra una administración municipal que ha sido incapaz de convertirse en la voz de la calle que exige saber qué pasó. Porque la alcaldesa hace semanas que se publicita a costa del dolor, intentando apropiarse de la idea de empatía, rehuyendo toda responsabilidad política, folkloritzando el 'no tenemos miedo', mientras ocupa el lugar central de la jerarquía del poder 'despolitizado'", afirma Graupera en un artículo que exuda electoralismo.

Añade que "el equipo de gobierno de Ada Colau ha reclamado reiteradamente 'dejar al margen la política' para que el rey no tenga que oír protestas por el malestar que su presencia genera en la ciudad. Todo eso en nombre de las víctimas y de una idea de neutralidad homologable a la mejor tradición de la apropiación elitista de la política".

Las reflexiones de Graupera han sido duramente criticadas en las redes sociales.