Los expresidentes Artur MasJordi Pujol, Pasqual Maragall y José Montilla han decidido conservar sus escoltas tras finalizar sus mandatos. Por su parte, Pujol desalojó el 30 de julio de 2014 el despacho del que disfrutaba por ser expresidente de la Generalitat.

La oficina de Pujol costaba a los catalanes 140.000 euros al año, a lo que se suma su pensión vitalicia de 86.000 euros anuales, beneficios a los que ha renunciado. Al único beneficio al que sí se aferra es al de la escolta policial.

Mas, el que más gasta 

Por su parte, Artur Mas, es el expresidente que más gasta, sobre todo en servicios de seguridad y escoltas. En las memorias de gastos presentadas por los expresidentes, Mas apunta 55.266 euros, José Montilla 42.604 euros y Pasqual Maragall, 29.701.

La ley recoge que los expresidentes tienen derecho a percibir un sueldo durante un tiempo limitado tras su mandato, a una pensión y jubilación y una oficina con personal a su cargo. De esos beneficios, Jordi Pujol renunció a casi todos --menos al escolta-- Mas y Maragall sí los utilizan y José Montilla renunció al salario cuando se incorporó al Senado.

Por su parte, Carles Puigdemont ha renunciado a una parte, la de cobrar el sueldo de expresidente porque ya cobra un sueldo público como diputado del Parlament, pero exige el beneficio del escolta y de los gastos de despacho a pesar de haber huido a Bélgica y no acabar su mandato.