El Ministerio del Interior no autorizará el envío de una escolta de los Mossos d'Esquadra al expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont, y rechaza así la petición que le hizo al Gobierno en este sentido el actual jefe del Ejecutivo catalán, Quim Torra.
El presidente catalán solicitó a mediados de julio a Interior su autorización para enviar una escolta armada a Puigdemont por su condición de expresidente, pero, según fuentes de Interior, "hace días" se le comunicó a la Generalitat la negativa.
"Si un policía ve a Puigdemont, tiene que detenerlo"
Según estas fuentes, la decisión de no facilitar una escolta armada a Puigdemont --algo que requiere la autorización de Interior-- se ha tomado previo informe de la Abogacía del Estado. Este se sostiene en dos puntos fundamentales para negarle este privilegio al expresidente catalán: la pérdida de condición de autoridad pública, y la existencia de un proceso judicial contra él y una orden de detención interpuesta sobre su persona en territorio español.
Así, aunque el juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena retiró las euroórdenes contra los políticos catalanes procesados que se marcharon al extranjero para evitar su arresto en España, desde Interior subrayan que sigue existiendo contra ellos una orden de detención nacional.
"Si un policía ve a Puigdemont, tiene que detenerlo; no protegerlo", apuntan las fuentes consultadas.