El episodio sin precedentes que se vivió este jueves donde un grupo de 600 migrantes saltó el doble vallado de Ceuta ha acelerado lo que, hasta ahora, solo era un declaración de intenciones del nuevo Ejecutivo socialista. El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha subrayado que se procederá a la retirada de las concertinas de las vallas situadas en las fronteras terrestres de Ceuta y Melilla "con carácter inmediato".
"No me gusta dar plazos porque muchas veces conducen a frustraciones pero va a ser con carácter inmediato", ha subrayado el titular de Interior en declaraciones a la Cadena Ser.
Garantizar la seguridad
Grande-Marlaska ha expresado la "preocupación" del Gobierno y que la modificación se llevará a cabo "siempre garantizando el mismo nivel de seguridad" porque, ha recordado, las fronteras son de dos países, de la UE y de Marruecos.
"Estamos haciendo un estudio muy pormenorizado para tener una posibilidad real y fiable de una frontera segura, pero con medios menos cruentos y está bastante avanzado el informe", ha apostillado.
Devoluciones en caliente
El titular de Interior ha explicado que en el asalto a la valla fronteriza de Ceuta han resultado heridos varios inmigrantes con cortes, entre ellos dos que han tenido que ser trasladados a centros hospitalarios. Ha relatado además que otros 16 agentes de la Guardia Civil han resultado también heridos, "todos ellos dados de alta hospitalaria".
En total, han conseguido entrar en territorio nacional un total de 602 migrantes. En esta línea, el ministro ha admitido que se han producido devoluciones sumarias de migrantes --también conocida como devolución en caliente-- aunque ha defendido que todas ellas "han sido en frontera, ninguna en territorio español".