Manuel Valls ha dado un paso más este domingo, entre líneas, hacia la alcaldía de Barcelona. Se ha sometido a una entrevista en profundidad en un programa de la televisión pública catalana que se ha filmado en París y en el que el que el político ha renegado del socialismo.
El programa ha arrancado casi con una declaración de intenciones. “A su alrededor hay mucho color amarillo, no sé si él lo sabe”, aseguró su prima, la escritora e ilustradora Roser Capdevila. Tras remarcar que ella siempre llevará el lazo amarillo “mientras haya un solo exiliado o preso político”, la creadora del Les Tres Bessones aseguró que Valls sería “un buen alcalde de París, ya que ha vivido allí toda su vida…Barcelona lo conoce de otra forma”.
El socialismo, un proyecto ‘caduco’
“Nos debemos respetar y tolerar, el mundo está hecho así”, remarcaba al final de su intervención. La trayectoria de Valls en Francia ha sido sometida al escrutinio de estudiantes y periodistas que remarcaron el oportunismo de un exprimer ministro con mala fama en su país y que se ha quedado huérfano de familia política.
Los ataques de Valls al socialismo han sido constantes. Tildó de caduco el proyecto del PS francés. Una crisis de la formación que no es exclusiva del país vecino. “La socialdemocracia lo pasa mal en toda Europa”, aseguró, “pero su ideal es válido y se debe reinventar en otras formas de organización”.
Derecha-Izquierda borrada
Se ha descrito como un político de izquierdas, aunque ha asegurado que en un “mundo globalizado” como el actual, la tradicional separación por extremos es volátil. “La gente se ha perdido mucho”, indica, “hay cosas que se hacen muy bien desde la derecha”.
Ha defendido que el “orden y la seguridad” son cuestiones también de la izquierda, aunque algunas formaciones de este arco las eludan. “La gente que lo pasa mal vive en barrios en los que hay problemas de drogas o de violencia; es la gente humilde”, ha relatado, “por lo que remediarlo es una gran política de izquierdas”.
La alcaldía de Barcelona, una incógnita
Valls mantiene en el aire si aceptará la oferta de Ciudadanos de encabezar la lista del partido en las próximas municipales. Su pretensión inicial era ser el número uno de una plataforma transversal que hiciera frente a los independentistas, aunque los socialistas catalanes han enfriado estas expectativas.
Ha lanzado también un dardo al partido de Miquel Iceta al recordar que sufrió una “derrota electoral muy fuerte en las europeas” de 2014. Fue uno de los invitados estrella del mitin final de esa campaña.
“Conozco bien, muy bien, Barcelona”, ha remarcado, aunque ha eludido entrar en un “debate que anticiparía una campaña electoral”. “El día en que diga si sí o no me interesa [la alcaldía en la ciudad] entraré en esa discusión”, ha señalado.
El “fracaso” del independentismo
El chico de Horta cargó duramente contra el nacionalismo. “Lo contrario del patriotismo”, según su punto de vista. Afirmó que una “Cataluña independiente sería un fracaso para España y para Cataluña, ya que sería menos fuerte en Europa de lo que lo es hoy”.
Ha enfadado al independentismo al avalar la causa judicial al procés. “Un acto político tan grave como querer separar Cataluña del resto de España tiene consecuencias”, ha asegurado, “gente en la cárcel y fuera del país”. Valls afirma que en Francia habría ocurrido lo mismo y, aunque entiende que es “difícil de entender”, tilda de “bastante normal” un desenlace como el actual.
Defensa del Rey
También ha defendido el discurso de Felipe VI del 3 de octubre en el que el monarca acusó a la Generalitat de “deslealtad”. “A mi me gustó, representa la unidad del país”, ha indicado, “lo que no me gustó es que se le gritara tras una manifestación”, la que tuvo lugar tras los atentados de las Ramblas y Cambrils. “A lo mejor se debían respetar a los muertos”, ha sentenciado.
Valls ha defendido que Cataluña “tiene una autonomía increíble, de las más realizadas en el mundo”. Una descentralización de los poderes del Estado que está en las antípodas del modelo político francés, aunque no parece que el exprimer ministro galo tenga reparos en meterse de lleno en el debate. Otro paso hacia una carrera por la alcaldía de Barcelona que aún está “en estudio”.