La nueva Asamblea Nacional de Cuba, surgida de las urnas el pasado 11 de marzo, propone que el sucesor de Raúl Castro al frente del Consejo de Estado sea el actual primer vicepresidente, Miguel Díaz-Canel, ingeniero de 57 años, tal y como se esperaba.
Este hecho se convierte en histórico porque, por primera vez desde la revolución de 1959, se otorgaría el control del país a alguien sin el apellido Castro.
La decisión, el jueves
Los 605 diputados electos han tomado posesión del escaño este miércoles constituyendo así el nuevo Parlamento y ahora deben decidir quiénes serán los 31 integrantes del Consejo de Estado, incluido su presidente, cargo ocupado por Raúl y antes por Fidel.
La Comisión Nacional de Candidaturas ha propuesto ya 31 candidatos, nominando a Díaz-Canel como reemplazo de Castro. Los diputados votarán hoy, pudiendo ratificarlos o elegir otros nombres, pero la decisión no se conocerá hasta el jueves.
Más cambios
En cuanto al resto del Consejo de Estado, Salvador Valdés, miembro del Buró Político del Partido Comunista Cubano (PPC), ha sido propuesto para primer vicepresidente, vacante que dejaría Díaz-Canel y que suele marcar la línea sucesoria, aunque este no sería el caso dada la edad de Valdés, 72 años.
Ramiro Valdés, Roberto Tomás Morales, Gladys María Bejerano, Inés María Chapman y Beatriz Jhonson han sido nominadas para las cinco vicepresidencias ordinarias, de acuerdo con el diario oficial Granma.
Hasta el 2023
Si se confirma a Miguel Díaz-Canel como jefe de Estado y de Gobierno, éste deberá continuar la tarea inconclusa de reformar la economía, el desafío más urgente de Cuba. El mandato durará cinco años.
Por otra parte, aunque Castro da un paso al lado, retendrá el cargo de primer secretario del Partido Comunista Cubano hasta 2021, cuando se completará la transición política en el país.