La Fiscalía belga ha abierto diligencias contra España por el uso de un geolocalizador en el coche que Carles Puigdemont utilizó para viajar a Helsinki. Según la fiscalía belga, el CNI habría colocado este dispositivo en Renalut Espace que usaba el expresidente de la Generalitat para moverse por Bruselas y alrededores. La portavoz de la Fiscalía de Bruselas, Ine Van Wymersch, confirmó este jueves la existencia de la investigación, aunque ha señalado que no pertenece a su departamento, sino a las autoridades del Brabante Valón, región en la que se integra el municipio de Waterloo, donde residía Puigdemont.

Dos semanas antes de su detención en Alemania, dos de los Mossos d'Esquadra que escoltaban a Puigdemont en Bruselas encontraron la baliza de localización en los bajos del coche. Los asesores del político independentista pusieron este hecho en conocimiento de la justicia, algo por lo que las autoridades belgas ya habían iniciado las pesquisas correspondientes para descubrir quién colocó el aparato y a quién remite los datos.

Validez jurídica

La Fiscalía belga investiga si la colocación de este dispositivo estuvo motivada por una resolución judicial válida. Además, las autoridades investigan a qué otro geolocalizador enviaba los datos. Estos aparatos funcionan con una tarjeta que se comunica con otra. A partir del aparato hallado en el vehículo, Bélgica quiere descubrir con qué número se comunicaba y saber quién estuvo detrás de la instalación del dispositivo.