La extradición de Carles Puigdemont puede tardar entre 10 y 60 días en hacerse efectiva. El expresidente ha sido detenido este domingo en Alemania por las autoridades del país mientras cruzaba la frontera con Dinamarca en dirección a Bélgica. Ha sido en aplicación de la euroorden emitida por el juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena.
Según la legislación europea, si el arrestado manifiesta su consentimiento con la entrega al país que ha emitido la solicitud de extradición, el plazo máximo para su entrega son 10 días. En cambio, de no hacerlo, el país que ha realizado la detención tiene hasta 60 días para tomar una decisión final.
Proceso largo
De momento, la Fiscalía General del Estado ya ha comunicado que ha contactado con las autoridades alemanas para entregarles toda la documentación necesaria para la entrega. En Twitter, algunos recordaban que el procedimiento no es inmediato, sino que puede prolongarse en el tiempo, así como que la extradición no está asegurada.
El magistrado Llarena reactivó el viernes las euroórdenes contra Puigdemont y los exconsejeros que huyeron con él a Bélgica: Toni Comín, Clara Ponsatí, Meritxell Serret y Lluís Puig. También emitió solicitudes de extradición para las exdiputadas que se encuentran en Ginebra, Anna Gabriel (CUP) y Marta Rovira (ERC).