La operación judicial que investiga a los responsables del referéndum ilegal del 1 de octubre se ha ido ampliando, y en el punto de mira están ahora también los principales dirigentes de la CUP que colaboraron con el anterior gobierno de Carles Puigdemont. Esta nueva fase de las pesquisas judiciales podría ser la razón por la que Anna Gabriel haya decidido mudarse a Venezuela de forma indefinida. 

La exdiputada autonómica está en Venezuela colaborando en la campaña electoral a favor de Nicolás Maduro, actual presidente de Venezuela, para eludir su declaración ante el Tribunal Supremo por los cargos de rebelión que se le imputan, según informa el diario ABC.

Aplazamiento

De momento, Gabriel ha pedido al juez Llarena aplazar su declaración hasta el día 21 a través de su abogado, quien habría manifestado que ya tenía una señalamiento previo. Su compañera de filas, Mireia Boya, sí que está dispuesta a prestar declaración ante Llarena, han agregado fuentes cercanas a la exdiputada.



Llarena mantiene para el 14 de febrero, fecha inicial de la citación de Gabriel, el interrogatorio ya fijado para Boya. El lunes día 19 será el turno de Marta Pascal y de la número dos en la lista de ERC, Marta Rovira; y al día siguiente concluirán los interrogatorios Artur Mas y la expresidenta de la Associació de Municipis per la Independència (AMI), Neus Lloveras.

Comité estratégico

El juez instructor amplió en un auto del pasado 22 de diciembre la investigación contra estas seis personas --la causa cuenta con 28 imputados-- por los delitos de rebelión, sedición y malversación por su participación "especial y destacada" en el proceso independentista. Esta decisión la tomó tras conocer el informe de la Guardia Civil en el que señalan que todos ellos habría formado parte del Comité estratégico para declarar unilateralmente la independencia de Cataluña.

Así constaba en el documento Enfocats, la hoja de ruta para la creación de un nuevo Estado, incautado en el domicilio de Josep María Jové, número dos del exvicepresidente Oriol Junqueras. También se le requisó una agenda en la que había apuntes manuscritos sobre el proceso independentista.