Josep López de Lerma sigue sin salir de su asombro. Exdiputado de CiU en el Congreso, exvicepresidente de la cámara, fue uno de los grandes muñidores de acuerdos entre los nacionalistas y los gobiernos españoles, de distinto color. Ahora, y desde su conocimiento estrecho de la figura de Carles Puigdemont, --un joven Puigdemont colaboró con López de Lerma en las campañas electorales en la circunscripción de Girona—lamenta el giro independentista. “El independentismo lo ha roto todo, ha dividido a la sociedad catalana, y ahora será difícil recomponer las cosas”.
El exdirigente de CiU, que se enfrentó a Jordi Pujol, como miembro de lo que se conoció como “roquismo”, los seguidores de Miquel Roca que abogaban por participar en la gobernación de España integrándose en los ejecutivos españoles, considera que el catalanismo tiene una difícil continuidad. En una entrevista en el programa Converses, de la Cadena Cope, con la participación de Crónica Global, López de Lerma entiende que lo que ha representado históricamente CiU y el PSC lo podría recoger Ciudadanos, pero siempre que asuma una apertura mayor hacia lo que defiende la sociedad catalana en su conjunto. “Ciudadanos integrará el catalanismo, aunque para ello deberá hacer un esfuerzo, y no sólo defender una identidad, la española, sino también aquella que se identifica con la identidad catalana, o tan española como catalana”, asegura.
El voto al PSC-Units per Avançar
Si el partido que lidera Inés Arrimadas en Cataluña, y que ganó las elecciones del pasado 21-D, aunque no logró una mayoría parlamentaria del bloque constitucionalista, realiza ese esfuerzo, podría ser la fuerza central en Cataluña, a juicio del exdiputado nacionalista.
Sin embargo, López de Lerma admite que el 21-D votó al PSC, a la candidatura de Miquel Iceta. “Voté PSC-Units per avançar, porque me pareció lo más sensato y lo posible, lo que ocurrió es que todo se ha polarizado en exceso, sin margen para otras opciones, que, en realidad, aportarían la solución”. Lo que ocurre, añade, es que Iceta “es un líder de transición, con una dificultad para gestionar lo que viene a partir de ahora”.
Posible ruptura de JuntsxCat
Con una realidad política anclada en dos bloques tan distantes, López de Lerma se muestra pesimista, sin saber qué puede suceder en las próximas semanas. Lo que tiene claro, conociendo a Puigdemont, es que “no se puede dar por finiquitado lo que defiende, porque, además, domina el grupo parlamentario, Junts per Catalunya, que él mismo configuró”.
El peligro, eso sí, es que ese grupo se pueda romper. “Existe esa posibilidad, porque en el momento de la verdad, si se persiste en investirlo, con los riesgos legales para los diputados, los diputados acabarán optando”. Es decir, lo que está en juego ahora, a juicio del exdiputado, es que el grupo de Puigdemont elija a otro candidato para poder gobernar y forzar que decaiga el artículo 155 de la Constitución.
La oferta "seria" de Aznar
López de Lerma cree que ahora no tiene mucho sentido reflexionar sobre lo que pudo ser y no fue, pero defiende que la oferta de José María Aznar a Pujol, en dos ocasiones, en 1996 y en 2000, “fue seria, era real, y se pudo haber configurado una nueva situación política”, aunque no se atreve a vislumbrar si ahora Cataluña se encontraría o no en la misma situación. Entonces, Aznar propuso la entrada de ministros catalanes de CiU, para cogobernar España, como relata con detalle en su libro Cuando pintábamos algo en Madrid, pero Pujol lo rechazó, exactamente igual que cuando esa oferta la realizó Felipe González en 1993.
De lo que no tiene duda es que Puigdemont “irá hasta el final, al margen de todo lo que ha salido sobre su supuesta derrota. Es un testarudo, el más testarudo que yo he conocido en mi vida”, señala.