Cinco denuncias por el supuesto espionaje de los Mossos d'Esquadra a personas y asociaciones constitucionalistas. El expresidente de Sociedad Civil Catalana (SCC), Josep Ramon Bosch, Barcelona con la Selección, el abogado José María Fuster-Fabra y David José, portavoz del Sindicato de Policía de Cataluña (SPC), y su esposa, se han querellado contra el cuerpo.

Según ha avanzado ABC, las denuncias han sido interpuestas durante las últimas semanas. Los querellantes acusan al cuerpo de policía autonómico de malversación de fondos públicos, descubrimiento y revelación de secretos, obstrucción a la justicia y omisión en el deber de perseguir delitos.

Han pedido que los responsables de los Mossos que, presuntamente ordenaron esos seguimientos, sean citados en el juzgado, en un proceso paralelo al abierto por la Audiencia Nacional (AN), y que instruye la juez Carmen Lamela.

Incineradora

Los escritos al juzgado tienen como base, en parte, la documentación que la Policía Nacional incautó a agentes de los mossos cuando éstos se disponían a trasladarlos a la incineradora de Tersa de Sant Adrià de Besòs para su destrucción el pasado 26 de octubre, el día antes de la declaración unilateral de independencia (DUI) en el Parlament.

La policía autonómica siempre ha defendido que no ordenó la vigilancia especial a ningún colectivo o persona. Con respecto al incidente de la instalación del Besós, los Mossos han asegurado que es práctica habitual trasladar y destruir documentos sensibles.

Como avanzó El Periódico, además de los documentos relacionados con los supuestos seguimientos, la documentación que interceptó la Policía Nacional contenía un aviso de la CIA sobre una alerta terrorista en Las Ramblas de Barcelona, que el cuerpo negó haber recibido.