La candidatura del expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont, JxCat, ha afirmado este martes que está en "contacto permanente" con ERC y la CUP para garantizar que se cumpla el resultado de las elecciones autonómicas del 21 de diciembre, han explicado fuentes del partido.
Esto pasa, según JuntsxCat, por que se ponga fin a la aplicación de artículo 155 de la Constitución y que el Gobierno central acepte el resultado de las urnas y por lo tanto "rectifique, repare y restituya la situación anterior al 155".
Las conversaciones, asegura JuntsxCat, continuarán el los próximos días con el objetivo de "constituir el Parlament, elegir a la Mesa e investir al presidente Puigdemont", una investidura que garantizan que es posible pese a que actualmente se encuentra en Bruselas.
En Barcelona y en Bruselas
JxCat ha explicado que el contacto permanente con la CUP y ERC para desencallar la situación se produce tanto en Barcelona como en la capital belga.
La candidatura del presidente cesado, que logró 34 diputados y ser segunda fuerza, asegura que la reversión del 155 también tiene que suponer "la liberación de los presos políticos y el regreso de los exiliados con seguridad y garantías para que puedan ejercer sus derechos políticos con plenitud".
Así, piden la puesta en libertad de Oriol Junqueras, Jordi Cuixart, Jordi Sànchez y Joaquim Forn --los dos últimos candidatos de JxCat--, y el regreso con garantías de los miembros del Govern cesado que están fugados en Bruselas: Puigdemont, Lluís Puig, Clara Ponsatí --también candidatos de JxCat--, y Toni Comín y Meritxell Serret.
ERC no lo ve claro
JuntsxCat mantiene la apuesta por investir a Puigdemont, después de que el portavoz de ERC, Sergi Sabrià, haya pedido a esta candidatura que aclare como quiere materializar esta investidura, ya que no es algo "sencillo" teniendo en cuenta que el presidente cesado está en Bruselas.
ERC asegura que, "a día de hoy", no tiene otro candidato que no sea Puigdemont para la investidura, pero reclama que JxCat explique como pretende investirlo teniendo en cuenta la dificultad para hacerlo que supone que el presidente cesado esté en Bélgica.
ERC, JxCat y la CUP suman 70 diputados, suficientes para investir al presidente que consideren oportuno --la mayoría absoluta está en 68 escaños--, pero deben superar el obstáculo que supone que cinco de sus diputados electos estén en Bruselas y tres en la cárcel.