La marcha de Jorge Moragas, hasta ahora jefe de gabinete de Mariano Rajoy y diputado por Barcelona en el Congreso, ha salpicado a las filas del Partido Popular del Ayuntamiento de Barcelona. Todos los focos señalan a Ángeles Esteller, portavoz del grupo municipal en el consistorio, como sustituta.
Pero ni ella misma sabe si será así: tiene que decidirlo en enero. Como también ha de decidir el propio Moragas cuándo renunciará a su escaño para incorporarse como nuevo embajador de España ante la ONU, una decisión meditada, que supuestamente habló con Mariano Rajoy hace un año y ambos acordaron materializarla tras las elecciones del 21D.
Manu Reyes, opción B
Fuentes cercanas al caso han explicado a este medio que si, finalmente, Esteller decide no entrar en el Congreso como diputada, probablemente lo haría Manu Reyes, exalcalde de Castelldefels (Barcelona) y presidente del PP en la Diputación de Barcelona.
Reyes ha sido una pieza clave de la formación en los últimos comicios después de que el líder popular catalán, Xavier García Albiol, lo eligiese como uno de los nombres que aportarían el toque de renovación a las listas.
¿Villagrasa en territorial?
Si fuera él el nuevo diputado en el Congreso, tendría que renunciar a su puesto en la Diputación y pasaría a ocuparlo Josep Llobet, presidente del PP de Gavà (Barcelona) y coordinador de acción territorial del partido en Cataluña.
En el caso de que Llobet entrase en la Diputación, ocuparía su puesto Alberto Villagrasa, concejal en el Ayuntamiento de Barcelona y hasta ahora diputado en el Parlamento de Cataluña. Pese a que inicialmente debería tomar asiento en el escaño de Esteller en el consistorio barcelonés, ya que es el número cuatro de la lista por detrás del líder del grupo municipal, Alberto Fernández, y el concejal Javier Mulleras.
No será hasta el próximo mes cuando se desencalle todo el entramado que afecta, de rebote, a los tres concejales del PP en el ayuntamiento. De momento, repiten las mismas fuentes, todo son carambolas.