El procés terminó con la declaración unilateral de independencia en el Parlament el 27 de octubre. Así lo entiende ERC, que mira al futuro sin intención de "volver a escenarios pasados". No obstante, sigue sembrando dudas sobre el resultado que pueda salir de las urnas el 21D.

El portavoz de ERC, Sergi Sabrià, ha declarado que el partido no renuncia a nada "y la declaración de independencia ya está hecha". Dicho de otro modo, los republicanos trabajarán por otros objetivos a partir del 22D (ganen o no las elecciones), distintos de los movimientos que ha implicado el procés, aunque derivados del mismo.

¿Pucherazo?

En palabras a Cope, ha mantenido que "si alguien utiliza la ley de parte para convocar elecciones es que algún interés tiene". Es decir, ha vuelto a deslizar que las elecciones del 21D son impuestas por el Gobierno y, por tanto, sus posibles resultados generan desconfianza: "Tenemos derecho a sospechar y ya está, no pasa nada". Los expertos dicen que el pucherazo es imposible.

Finalmente, ha defendido las palabras del exconseller de Justicia Carles Mundó, quien sugirió que era mejor la convocatoria de elecciones que la DUI. En este caso, dice que era una explicación táctica "en un momento de muchísimas dificultades donde se podían tomar muchas decisiones y en ningún caso suponía ningú tipo de renuncias".