El líder del PSC, Miquel Iceta, está dispuesto a romper todos los moldes, aunque sus propuestas no son nuevas. Las defendió el PSC en las elecciones de 2015, y se recogieron en el Estatut de 2006. Una de ellas es la puesta en marcha de una Hacienda propia para Cataluña, consorciada con la agencia estatal. Pero Iceta se ha unido este lunes a la propuesta lanzada por el lehendakari, Íñigo Urkullu, que se ha mostrado partidario de extender el modelo de financiación del País Vasco al resto de autonomías, siempre que sea factible. “Si los números salen, ¿por qué no?”, ha afirmado Iceta.
El candidato del PSC ha decidido apostar por su propia figura, sin ningún complejo, y se presenta como el próximo presidente de la Generalitat, con la idea de que el resto de fuerzas constitucionalistas, pensando también en Els Comuns, el partido de Ada Colau, faciliten su investidura. “No veo, sinceramente, que las propuestas del resto de candidatos sean mejores, por ejemplo respecto a la financiación de Cataluña”.
El candidato del PSC defiende una Hacienda propia consorciada a la estatal, como recogió el Estatut
Esa cuestión, sin embargo, es polémica, porque choca contra los postulados de Ciudadanos y del PP. De hecho, el partido que lidera Albert Rivera ha hecho de su voto en contra de la renovación del Cupo vasco una bandera en toda España. Pero lo que Iceta defiende se incorporó en el Estatut de 2006, y no fue vulnerado por la sentencia del Tribunal Constitucional. Lo que ocurrió es que el proyecto de consorciar la Agencia Tributaria de Cataluña con la del Estado no se puso en pie, y se fue demorando.
Con la victoria del PP en las elecciones de 2011, esa idea se dejó definitivamente de lado. Iceta ha insistido en que el problema no es el concierto económico, ni el Cupo en sí mismo, sino "la cantidad que se destina a solidaridad, a pagar los servicios conjuntos del resto del Estado", y que si se alcanza el consenso en eso, una Hacienda propia consorciada es perfectamente viable.
Iceta ofrece a los empresarios y a toda la sociedad "la tranquilidad que cierre esta fase de incertidumbre"
Iceta, en una intervención en Tribuna Barcelona, ha insistido en que ahora se trata de superar una etapa de desgarro en la sociedad catalana. Y que es consciente de que puede recibir voto de no socialistas únicamente en esta ocasión. Con un auditorio empresarial, y como ha ocurrido en otros foros como en el Círculo Ecuestre, se ha comprometido a pasar “de las trincheras a los puentes”, ofreciendo “la tranquilidad” que el tejido empresarial necesita y reclama, porque el gran enemigo es “la incertidumbre, que ahora se debe superar”.
Su idea es negociar los 46 puntos que ya había puesto sobre la mesa Artur Mas y que recogió también Carles Puigdemont, con una propuesta “de Estado para Cataluña” que vaya resolviendo el conflicto, y que pueda resolverse de una forma más definitiva con una reforma de la Constitución, que debería, eso sí, “tener un apoyo masivo en Cataluña” en el momento en el que se celebre el correspondiente referéndum.
En ese momento, Iceta fue informado de la decisión del Tribunal Supremo de dejar en prisión a Oriol Junqueras, Joaquim Forn, Jordi Sànchez y Jordi Cuixart. “Es una mala noticia, porque lo mejor sería asegurar una campaña electoral con todos en libertad”, señaló.