Societat Civil Catalana quiere coser desde todos los frentes la ruptura que se ha producido en Cataluña tras más de cinco años de proceso independentista. La entidad de referencia del unionismo en Cataluña quiere consolidar su éxito con la expansión por el resto del territorio.
El objetivo es que la sociedad civil española también se involucre. Para ello, y según ha podido saber Crónica Global, ha decidido que la próxima estación sea Madrid, la capital del Estado. El expresidente de la entidad Mariano Gomá será el máximo representante de la sede capitalina, junto a los expresidentes Josep Ramon Bosch y Rafael Arenas. Gomá fue, además, nombrado recientemente presidente del consejo consultivo de la entidad.
Este organismo creado de nuevo cuño funcionará de forma paralela a la junta directiva. Ya estaba contemplado en los estatutos de la entidad, pero solo la visibilidad que ha experimentado SCC en los últimos tiempos --también a nivel nacional-- ha alentado su creación.
Financiación privada
De momento, el proyecto se encuentra en fase embrionaria, pero fuentes de la entidad aseguran que prevén celebrar un gran acto antes de las elecciones catalanas del próximo 21 de diciembre para “movilizar el voto” constitucionalista. Por su parte, el máximo representante de la futura embajada se muestra prudente. Gomá asegura que aún no se han cerrado muchas cuestiones, como por ejemplo dónde “se ubicará” la nueva sede. Pero han recibido ofertas de diversos empresarios para cederles locales de forma gratuita.
Y es que, además de asociaciones civiles, figuras del mundo empresarial y político se han mostrado favorables a colaborar en el desembarco de Societat Civil Catalana en Madrid. “Todo lo haremos con financiación privada. No tenemos ni un euro de subvención”, sostiene Gomá. Además de la embajada en Madrid, cuentan con sedes en Londres y Bruselas, y prevén abrir otras dos más en París y Berlín. Como explicó su actual presidente, José Rosiñol, en El Español su estructura es parecida "a la de Greenpeace": se financian a través de los socios y las donaciones de privados.
Proyecto a largo plazo
Más allá de tener la vista puesta en los comicios autonómicos, quieren "idear un relato" a largo plazo que incida en la "historia compartida entre Cataluña y el resto de España". En este sentido, el independentismo ha ido ganando terreno y desde SCC quieren entrar a jugar este partido.
Otro de sus objetivos es ser una institución de referencia para los catalanes en Madrid y que se sientan interpelados a participar en las elecciones autonómicas y en todo lo que tiene que ver con Cataluña. “Ya hemos sacado dos veces a un millón de personas a la calle. Quizás esto ya no es tan necesario como elaborar un ideario”, apostilla Gomá para, también, marcar distancias con la forma de obrar de su adversaria directa, la Assemblea Nacional Catalana.
“Sumar al Podemos de Bescansa”
La transversalidad adquirida recientemente por Societat Civil Catalana con el apoyo explícito del PSC, que anteriormente había sido más reticente que Cs y PP a sumarse, ha tenido su premio. La junta directiva siempre había mantenido su neutralidad respecto los partidos políticos. Pero la reciente incorporación en la candidatura del PSC de dos de sus miembros (Álex Ramos y Manuel Sánchez Acosta) ha suscitado la crítica de una parte de los miembros del órgano directivo, al considerar que deberían haberse mantenido al margen como se ha hecho con las listas de los partidos de Xavier García Albiol e Inés Arrimadas.
Gomá, que ya no ostentaba el cargo de presidente cuando se tomó la decisión, quita hierro al asunto y cree que ha contribuido a que a los socialistas catalanes apoyaran sin complejos a la entidad. A este respecto, apuesta por ampliar la izquierda, “sumando al Podemos de Carolina Bescansa” a su iniciativa: “La ideología básica de Podemos no tiene por qué ser la de Pablo Iglesias, sino que también está la de Carolina Bescansa”, ha dicho en referencia a las discrepancias sobre Cataluña entre el secretario general y la cofundadora y diputada de la formación.