El exprimer ministro francés Manuel Valls ha asegurado este martes que los dirigentes independentistas "engañaron mucho a los catalanes" sobre el apoyo que supuestamente recibirían por parte de la Unión Europea en caso de independizarse, a lo que ha añadido: "Los líderes catalanes no deben subestimar el amplio respaldo a España de Europa. No hay posibilidad para Cataluña de salir de España y estar en la UE".
"Europa necesita a España porque la UE vive una crisis con los populismos. Necesita ser fuerte y no podemos aceptar que Estados nación tan importantes partan. Europa necesita un proyecto, un relato histórico, que los pueblos presuman de que somos un conjunto de democracias y estados de bienestar", ha apuntado en declaraciones a RNE.
El artículo 155
Asimismo, ha insistido en que la aplicación del artículo 155 de la Constitución por parte del Gobierno de España en Cataluña ha sido "lo mejor para salir de la crisis" secesionista y poder "votar" y ha recordado que "no hay salida para el independentismo porque es un callejón sin salida".
Además, ha confirmado su participación en un acto de Societat Civil Catalana (SCC) y en otro del Círculo de Empresarios. Estos encuentros tendrán lugar durante la semana anterior a la celebración de los comicios catalanes del 21 de diciembre en Barcelona.
"Voy a participar como hijo de catalán pero sobre todo como europeo con el mensaje de que España necesita a Cataluña y viceversa porque la identidad catalana es una identidad fuerte por su historia y su lengua pero su mayor fuerza es la de ser española y europea", ha explicado.
Justicia profesional
Con respecto a la actuación de la justicia belga con el expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont y de los exconsejeros que le acompañan, Valls ha asegurado que "la justicia belga es profesional e independiente" y que, al pertenecer a la UE, "tiene que respetar el espacio judicial".
También se ha pronunciado sobre la derrota de la candidatura de Barcelona para acoger la sede de la Agencia Europea del Medicamento y ha afirmado que "la inestabilidad siempre es mala cosa para los que deciden". A su juicio, "es difícil pensar que lo que está pasando en Cataluña no ha tenido consecuencias".