El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha declinado reconocer la república catalana. Ante las insistentes preguntas del periodista Jordi Évole en la segunda parte de la entrevista de Salvados, el líder bolivariano ha adoptado un perfil bajo inusual en su persona y ha asegurado que él “no se mete en los asuntos internos de España”.
Ha afirmado que “no puede” hablar de “política ficción” ante una eventual solicitud de asilo en el país del expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, o alguien del Gobierno catalán destituido. “Nadie lo ha solicitado”, ha puntualizado.
Reconocimiento de las nacionalidades históricas
En el caso de que le llegara, ha manifestado que se “evaluaría” porqué en “América Latina se contempla como un derecho humanitario”. Pero cuando se le ha pedido ir más allá, de nuevo ha evitado manifestarse. “No comments”, ha zanjado.
Asimismo, ha defendido que Venezuela es un país cohesionado que “lucha por su identidad de patria”, por lo que no se puede comparar con España y su “diversidad cultural y de identidades, que es muy rica”. Ha hecho referencia a la nacionalidades históricas, las de País Vasco, Galicia y Cataluña.
Petición de diálogo
Maduro también se ha unido a las peticiones de diálogo para solucionar el conflicto político catalán. “No se puede resolver a golpes y porrazos, se debe buscar el diálogo”, ha manifestado.
En este punto, sí que ha lanzado un nuevo dardo al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. Afirma que su “sordera y errores” continuados han llevado al enroque de la situación actual. Indica, asimismo, que los independentistas han triunfado en la internacionalización del conflicto político en Cataluña. Que se debe “resolver con diálogo”.
Niega la financiación a Podemos
Sobre España, también ha negado que los gobiernos chavistas hayan financiado a Podemos. Ha asegurado que no conoce personalmente a su líder, Pablo Iglesias. "Sólo le conozco por sus declaraciones en Twitter", ha precisado.
Asegura que el partido morado es un "fenómeno político de la sociedad española, no ha surgido porque Nicolás Maduro o Hugo Chávez les haya mandado o fundado". De hecho, considera que se les ha intentado "estigmatizar" con esta relación.