El cabeza de lista de la CUP en Barcelona, Carles Riera, ha acusado este sábado al CNI de tener en sus planes el promover altercados violentos en Cataluña si se proclamaba la república. En declaraciones a los medios tras presentar los candidatos de los antisistema para el 21D, ha manifestado que le constaba que los “servicios de inteligencia” preveían “incluso la posibilidad de colaborar con grupos de extrema derecha, generar conflictos violentos y acusar a la CUP”.
Afirma que ese era el plan para hacerlos “responsables” de altercados si se llegara a ejecutar la proclamación de independencia.
Informaciones de hace ‘meses’
Riera indica que “hace meses” que la formación tiene “constancia” de esta posibilidad, aunque no ha querido hacer públicas “las fuentes” que les habrían facilitado la información. “No es nada nuevo”, ha asegurado, ante estados “autoritarios y despóticos” como el español.
Los antisistema avivan de este modo la polémica que abrió la secretaria general de ERC, Marta Rovira. La acusación de que el Gobierno había amenazado a los líderes independentistas por “múltiples vías” con enviar al ejército y con “muertos en la calle” si mantenían sus planes de la declaración unilateral de independencia (DUI).
Respuesta de Rajoy
Un escenario de “violencia extrema” que el Gobierno de la Generalitat destituido no estaba dispuesto a asumir, según su relato. Para el portavoz del Ejecutivo, Íñigo Méndez de Vigo, las declaraciones de la número dos de ERC representan una “burda patraña”. “Los dirigentes secesionistas están acostumbrados a mentir”, remachó este viernes tras la reunión del consejo de ministros.
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, también contestó a las acusaciones de Rovira. Aseguró que las declaraciones de Rovira fueron una “vergüenza, ya no hay calificativo que tenga para aplicar a esa afirmación”. “Dejémoslo en que es absolutamente falso. Es una enorme mentira y, sobre todo, una vergüenza”.