Tensión informativa en esta Noche de Brujas. Finalmente, el presidente destituido de la Generalitat, Carles Puigdemont, permanecerá en Bruselas, mientras cinco de los integrantes de la delegación catalana en la capital europea han regresado a Barcelona. Entre ellos, el exconseller de Interior Joaquim Forn, recibido en El Prat entre banderas de España y gritos que piden su ingreso en Soto del Real.
Junto a Forn también ha regresado la destituida consejera de Trabajo, Dolors Bassa, tras acompañar al mediodía del martes a Puigdemont en una rueda de prensa en Bruselas. Han aterrizado en El Prat poco después de las once de la noche, sin ofrecer ninguna declaración.
Insultado
Un grupo de 10 personas contrarias al independentismo ha recibido a Forn con banderas de España y gritos, muy de cerca, que lo llamaban “perro”, “cabrón”, “a prisión”, “viva España”, “dónde está Puigdemont” y “os habéis cagado”. Han seguido al exconseller desde la zona de llegadas de la T1 hasta la entrada del parking, donde dos mossos d’esquadra han vigilado que no se le acercasen.
Poco antes de partir Forn de Bruselas, Puigdemont ha hecho unas breves declaraciones a los periodistas que le esperaban a su salida del hotel donde se ha hospedado.
Citados a declarar
Ha dicho que no ha recibido ninguna citación para declarar el jueves y viernes en la Audiencia Nacional, y que ha sabido por la prensa que la jueza de la Audiencia Nacional Carmen Lamela ha admitido este martes la querella de la Fiscalía General del Estado por presunta rebelión, sedición y malversación de caudales públicos
Es una querella contra él y los que han sido sus 13 consellers, a los que cita a declarar para el 2 y 3 de noviembre, han informado fuentes jurídicas.