De nuevo se rinde a las peticiones de los grupos independentistas ERC y PDeCAT. Ada Colau, alcaldesa de Barcelona, ha decidido posponer el Pleno ordinario previsto para este viernes, 27 de octubre, tal y como hizo con la sesión municipal del pasado septiembre.
Lo hace, según argumenta, para evitar que coincida con la sesión del Senado en la que se debatirá la aplicación del artículo 155. Y respondiendo a las demandas soberanistas de quienes quieren ahora negociar con ella, Colau ha convocado un Pleno extraordinario el jueves de la próxima semana.
En esta sesión, que dará comienzo a las nueve de la mañana, se abordará una propuesta en defensa de las instituciones catalanas y en contra del encarcelamiento de los Jordis por un delito de sedición.
Rechazo de la oposición
Una decisión que se ha acordado por mayoría y con el rechazo del Partido Popular y Ciudadanos. Alberto Fernández, líder popular, ha reclamado volver a la cotidianidad en el ayuntamiento, “ya que Colau hace unos días se reunía con los agentes sociales de Barcelona para reclamarles normalidad y que no paralicen la actividad económica, pero a su vez promovía la suspensión de las comisiones y plenos municipales”.
Carina Mejías (Cs), por su parte, ha recordado a la alcaldesa que debe decidir si quiere ser “socia honorífica de los independentistas y poner el ayuntamiento al servicio del golpe a la democracia o si prefiere aplicar la Constitución y las leyes que nos obligan a todos”.