Acción-reacción. La Generalitat monta un referéndum de autodeterminación a la postre ilegal y el Gobierno le exige semanalmente la relación de gastos para evitar que destine dinero público para la organización de la consulta; el miércoles, el vicepresidente del Govern, Oriol Junqueras, anunció al ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, que ya no le pasará más notas al respecto, y, ayer viernes, el Ejecutivo Central respondió con un ultimátum antes de intervenir las cuentas autonómicas. Pero el independentismo se empeña en tener la última palabra y Junqueras denunció después que es una "manera encubierta" de aplicar el artículo 155 de la Constitución en Cataluña. Esto es, la intervención de la autonomía.
"Intervenir las cuentas del Govern es una manera encubierta de liquidar las instituciones del país y una manera encubierta de aplicar el artículo 155 de la Constitución", dijo el líder de ERC, en el primer acto de campaña organizado por los republicanos. En su intervención, aseguró que el PP está aprovechando el 1-O como excusa "para liquidar todos los principios fundamentales de la democracia del Estado español".
Llamada a las urnas
Le ha advertido de que "intervenir las cuentas de la Generalitat no frenará ningún referéndum", y ha recordado que a finales de julio la Generalitat ya dijo que iba a correr con los gastos de los servicios básicos de Cataluña. "Quieren frenar el referéndum, erosionar la democracia y la prosperidad de nuestra economía", lamentando que las acciones del PP solo producen riesgo en el correcto funcionamiento de las finanzas catalanas y de su productividad.
Ante más de 200 personas en el Centro Moral y Cultural del Poblenou, Junqueras ensalzó la capacidad económica de Cataluña: "Crecemos más que el doble de las economías de nuestro entorno y generamos más empleo", y pidió que toda Cataluña vaya a votar para no retroceder en derechos sociales.
"Lo que pone en riesgo el Gobierno del PP es la libertad de prensa, de reunión y de expresión", y concluyó su discurso con un grito pidiendo a todo el mundo que vote el 1-O.