La publicación del posicionamiento del consejo nacional de UGT de Cataluña respecto al 1-O, un texto extremadamente tibio, ha destapado de nuevo la caja de los truenos en el seno de la organización. Incluso desde algunos sectores de la cúpula del sindicato se interpreta como una nueva victoria de los independentistas.
“Es un sector minoritario, pero gana influencia”, indican fuentes cercanas al secretariado. El texto se empezó a gestar en verano tras el malestar que generó la firma de un manifiesto que llamaba a la participación masiva en el referéndum por parte de los sindicalistas de Girona. Estamparon su rúbrica junto a representantes de ERC, la CUP y Podem de la provincia.
Respuesta del área metropolitana
Se saltaron la directriz que había marcado desde el primer día que se puso al frente de la organización Camil Ros. Impuso un perfil bajo ante el procés para evitar el desgaste que había provocado hasta el momento que UGT de Cataluña --y su secretario general-- fueran considerados independentistas por alguno de sus posicionamientos como mínimo ambiguos.
La respuesta de los sectores más próximos al PSC, especialmente en el área metropolitana y la segunda corona de Barcelona, fue presionar para dejar claro que en el sindicato también existen voces contrarias a la votación anunciada. Y chocaron con los independentistas, que intentaron neutralizar esta expresión.
El resultado: el texto que ha levantado polvareda.
Más allá del Pacto Nacional por el Referéndum
Los críticos con la publicación consideran que directamente lesiona a los no independentistas. Afean que se limite a dar libertad de posición y cargar contra la “actitud de bloqueo” del PP ante el procés, sin hacer ninguna referencia a que el 1-O va mucho más allá de la votación que se defendió en el Pacto Nacional por el Referéndum.
“Se habló de un referéndum legal, pactado y con garantías, condiciones que no se dan”. “En el mejor de los casos sería una consulta”, reivindican sindicalistas del área metropolitana.
Falta de apoyo de Pepe Álvarez
También lamentan el silencio del sindicato confederal. Recuerdan que el nuevo secretario general de CCOO, Unai Sordo, sí que se ha mostrado abiertamente contrario a la actual deriva del proceso secesionista y ha dejado claro que la organización que lidera no llamará a la participación masiva a las urnas. La otra central sindical ha decidido mantener el respeto sobre lo que cada afiliado decida hacer el 1-O a título individual.
Pepe Álvarez se ha cuidado mucho hasta el momento de hacer ninguna declaración pública sobre el procés o la votación del 1-O. Y no es precisamente por falta de conocimiento de lo que ocurre en Cataluña. Además de liderar durante más de 23 años la organización catalana, mantiene su vivienda en Barcelona y está informado de las novedades del territorio.
Los no independentistas de UGT piden más contundencia ante la “fuerte convulsión política que Cataluña vive en los últimos años”. El inicio de la declaración pactada para el 1-O, pero en un sentido contrario al documento presentado.