Quedan pocos días para que comience el curso escolar y las familias se preparan para asumir los gastos que ello comporta. Unas lo tienen más fácil que otras. En comunidades como Andalucía, Navarra o Madrid, los libros de texto son gratuitos, lo que supone un ahorro de 300 euros. En la Comunidad Valenciana se ha activado el programa Xarxa de llibres, consistente en otorgar ayudas de hasta 200 euros a los padres para comprar esos manuales escolares que luego se recuperan y depositan en un banco de libros. Los más habitual es el préstamo de libros, algo que se ha implantado en Asturias, Canarias, Cantabria, Castilla y León, Ceuta, Galicia y Extremadura.
No ocurre así Cataluña, donde la Generalitat se niega a sufragar ese coste. La culpa, afirma la Consejería de Enseñanza, es del Estado y sus recortes.
Un tema muy debatido en el Parlament
El Parlamento de Cataluña ha debatido este asunto en diversas ocasiones. La última tuvo lugar el pasado 15 de julio, a raíz de una moción de Ciudadanos. Era la cuarta vez que la formación naranja presentaba una iniciativa sobre este asunto, después de hacerlo con éxito en otras comunidades como Madrid o Andalucía. C,s sometió a votación un texto, según el cual, el Parlament instaba al Govern a “garantizar que todos los centros docentes de educación primaria y secundaria obligatoria de la red pública que lo deseen, en el marco de su autonomía, tengan derecho a establecer un sistema de préstamo de libros de texto gratuitos que sean una alternativa efectiva a la adquisición privada de la propiedad de los mismos”.
Una iniciativa “insuficiente”, según la diputada de Ciudadanos Sonia Sierra, pero que fue finalmente aprobada con el apoyo de todos los grupos parlamentarios, excepto Junts pel Sí. El PSC defiende la recuperación de la partida presupuestaria que el Gobierno tripartito destinaba a la reutilización de libros de texto.
Los recortes del Gobierno español
La Conselleria de Enseñanza alega que, en 2011, el Gobierno español dejó de pagar a la Generalitat los 11 millones destinados a la gratuidad de los libros de texto. No obstante, afirma que un total de 970 centros escolares de toda Cataluña han recibido ayudas de la Generalitat destinadas a las familias con menos recursos que no pueden pagar los libros de texto. Unas ayudas cifradas en un total de cuatro millones de euros. Esta modalidad de ayuda directa también se aplica en Aragón, Baleares, Castilla-La Mancha, La Rioja y Murcia.
Junto a la autogestión de las escuelas en materia de gratuidad, el Gobierno catalán argumenta que el uso de libros está desfasado y que ahora se utiliza otro tipo de material escolar. Pero la diputada Sonia Sierra asegura que solo hay un 20% de centros en Cataluña no hacen servir libros de texto.