Mismas palabras, distintos canales. Es la táctica del Gobierno catalán, la de repetir por tierra, mar y aire el discurso con el que ganar adeptos para el referéndum ilegal del 1-O. El consejero de Presidencia, Jordi Turull, ha calcado las palabras que pronunció el sábado su jefe, el presidente catalán, Carles Puigdemont, por el control que hará el Ejecutivo central de las cuentas autonómicas ante la sospecha de que se usen fondos públicos para la consulta de octubre.

Turull, igual que hizo Puigdemont en Twitter, ha retado al Gobierno a “mirar sus gastos” destinados a “informes falsos de las cloacas del Estado” antes de “dar lecciones o instrucciones” al Ejecutivo catalán, que asume la “responsabilidad” de cualquier decisión o gasto del referéndum unilateral del 1-O. El conseller lo ha hecho en declaraciones a Efe-TV desde Parets del Vallès (Barcelona), tras la entrega de trofeos en un torneo de 24 horas de fútbol sala.

Intervención financiera

El nuevo conseller, que también habló el sábado, ha repetido que el Gobierno ha “intervenido financieramente” a la Generalitat. Ha lamentado que pretenda controlar todos los gastos de la Administración catalana para que no se destine ni un euro al referéndum, una medida que anunció el Ejecutivo central el viernes y confirmó el sábado en el Boletín Oficial del Estado (BOE). Entre otras cosas, la Generalitat tendrá que hacer una auditoría de gastos hasta julio.

“Que miren también sus gastos, lo que han gastado en informes falsos de las cloacas del Estado o por qué no han sido tan vigilantes con los 60.000 millones destinados al rescate de la banca o los 1.400 millones para la plataforma Castor”, ha dicho. Como Puigdemont. En plena actitud de gallardía, Turull ha puesto nombres y caras a los responsables del 1-O: el Govern entero.

“Somos nosotros los que asumimos y ponemos la cara, la determinación y la decisión”, ha apuntado Turull, que ha exigido al Gobierno que deje a los funcionarios de la Administración catalana que sigan haciendo “su gran labor de manera correcta” sin inundarles con “papeleo”.

En manos de los ciudadanos

Turull ha garantizado que la Generalitat obedecerá el mandato del Parlament para organizar y celebrar el referéndum anunciado para el 1-O y ha agregado que, desde que se anunció la fecha y la pregunta del referéndum unilateral, la decisión sobre el futuro de Cataluña “está en manos de los ciudadanos”.

Para terminar, ha dicho que los ciudadanos deberán decidir si se creen o no el “ofertón del verano” que puede llegar in extremis desde la Moncloa.