Los incentivos de ERC y PDeCAT para querer repetir lista unitaria de Junts pel sí de las pasadas elecciones autonómicas son antagónicos. A tenor de la última encuesta publicada por La Vanguardia, el despegue de los republicanos es evidente: ganarían las elecciones al Parlament con el 48,5% de los sufragios y 43 diputados.

Por contra, el PDeCAT caería en votos --solo obtendría el 14,7% de los sufragios--, y pugnaría con Cs, ambos con 23 escaños, para mantener la segunda plaza en la Cámara catalana. 

La ascensión de ERC, sin embargo, serviría para mantener el tripartito soberanista formado junto a la antigua Convergencia y la CUP. La formación antisistema pasaría a tener 5 diputados (en comparación a los 10 de los comicios del 27S). De este modo, los tres partidos que lideran el proceso independentista cederían un escaño: de 72 a 71.