CCOO y UGT, como el PSOE, tampoco apoyan el CETA, el Tratado de Libre Comercio entre la Unión Europea y Canadá. Este lunes, han defendido que el acuerdo mermará la soberanía pública a favor de la privada y han matizado que en ningún caso su negativa supone ir en contra de la globalización. La formación socialista ha confirmado que se abstendrá en la votación.

Los sindicatos han asegurado que el CETA se ha negociado con “oscurantismos” y “atenta” contra la soberanía de España. “Se está intentando pasar con clandestinidad”, ha acusado el secretario general de UGT, Pepe Álvarez. Pide, al menos, un debate en el Congreso previo a la aprobación.

Opacidad en casi todos los países

El CETA es un tratado con el que perdemos soberanía y se le cede a entidades privadas. Huye de que continúe mandando la soberanía pública. Hay cuestiones que tienen que ver con los propios derechos laborales y deberían tratarse a fondo y si no se tratan, es porque nos están engañando como siempre, sin dar la oportunidad a la ciudadanía de que pueda hablar”, ha agregado.

El secretario general de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, también ha criticado esta opacidad —en casi todos los países—. En su intervención, ha declarado que el CETA “busca favorecer a las multinacionales y va en contra” del ordenamiento jurídico de España. Ha hablado de un posible deterioro en las relaciones de trabajo, según recoge Europa Press.

En manos de los socialistas

Por otro lado, la vicesecretaria general de UGT, Cristina Antoñanzas, una vez finalizada la reunión entre las tres ejecutivas (CCOO, UGT y PSOE) en Ferraz, ha expresado que le parece “positiva” la postura de abstención que ha adoptado el PSOE ante el tratado y que de no haberlo hecho, “nadie estaría hablando de él”.

“Nuestra postura es clara. Ahora es la ejecutiva del partido la que debe tomar la decisión” y votar, han subrayado.