“Se entiende rechazada la moción de censura. Se levanta la sesión”.
La tercera moción de censura de la democracia terminó como las dos anteriores: sin éxito. Era el resultado esperado. Podemos la presentó sin los apoyos suficientes para que fructificara. Y sólo ha arrastrado los votos de su partido (67, más 2 de Compromís), los de ERC (9) y los de EH Bildu (2). En total, 82 síes.
Al final de la sesión, el líder de Unidos Podemos, Pablo Iglesias, se ha girado para aplaudir a todos los que han apoyado la moción de censura.
Mayoría necesaria
La moción contó 82 votos positivos, 170 negativas (los 134 del PP; 32 de C’s; 2 de UPN; 1 de Foro Asturias; 1 de Coalición Canaria) y 97 abstenciones (84 del PSOE, 8 del PDeCAT y 5 del PNV) del total de 349 votos emitidos.
Para relevar a Rajoy, el candidato Iglesias necesitaba reunir la mayoría absoluta del Congreso (176 votos). Como en las mociones de 1980 y 1987, el presidente ha obtenido más apoyos que rechazos.
El error de Moragas
Una de las anécdotas de la votación ha sido el error de Jorge Moragas, el jefe de gabinete del presidente, Mariano Rajoy: ha dicho sí en lugar de no, aunque lo ha arreglado y su voto ha contado correctamente.
Antes, el nuevo portavoz socialista, José Luis Ábalos, ha declarado que el Gobierno merece “una censura”, pero también “la máxima crítica, una clara reprobación y la aplicación de un correctivo político”.
La amnistía fiscal
En su intervención, ha acusado al PP de ser el máximo responsable de “una doble degradación institucional y social” y ha criticado la amnistía fiscal “injusta e inmoral” a la que se han acogido los implicados en casos de corrupción.
Además, ha afirmado que el Gobierno ha utilizado las instituciones para “beneficio partidista” y ha utilizado a la Policía para menoscabar al adversario político y proteger a sus presuntos delincuentes por corrupción.
Puerta abierta a Podemos
Por otro lado, Ábalos ha dejado abierta la puerta a un futuro entendimiento con Podemos para “construir mayorías alternativas” con las que “desmontar las políticas injustas del PP y pedir las reformas justas que reclama la sociedad”.
Finalmente, ha reprochado a Iglesias que no apoyara la investidura de Pedro Sánchez hace un año, cuando “tocaba cerrar una etapa y abrirla”.
Precisamente la intervención de este nuevo hombre fuerte de Pedro Sánchez ha cumplido sus objetivos: tender puentes con Podemos, unir al grupo socialista y situar a un partido a la deriva hace solo unos meses en una posición digna.
La postura de Rivera y la crítica del PP
También ha hablado el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, quien ha dejado claro al PSOE que en ningún caso apoyarán un Gobierno apoyado en partidos independentistas catalanes después de que Ábalos dejara abierta la puerta a un entendimiento futuro con Podemos para construir una mayoría alternativa.
Más duro ha sido el portavoz del Grupo Popular, Rafael Hernando, quien ha llamado a Iglesias "mercenario" del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, le ha atribuido el "peor sectarismo" y le ha avisado de que "nunca será presidente del Gobierno de España".
España va bien
Hernando ha usado su réplica al candidato para recriminarle que durante su "numerito" se haya dedicado a "descalificar, atacar e insultar" al PP y al Gobierno con "mentiras" para "estigmatizarle" desde su "pensamiento de partido único". "El debate ha servido para conocerle mejor a usted", ha ironizado, antes de añadir que sus intervenciones han sido "una pura tortura", tan "aburridas" que hasta el alcalde de la Coruña, Xulio Ferreiro, no paró de jugar con su Ipad en la tribuna de invitados.
"Les han comprado hasta los de Irán", ha atacado el popular, quien también ha defendido que el PP es "honrado, decente y honesto" y que, gracias a la formación "España vuelve a ir bien". Hernando ha insistido en que Iglesias ha impulsado esta iniciativa ante la "debilidad y la fragmentación del PSOE", al que, desde su punto de vista quiere "extender la OPA" que Podemos hizo a Izquierda Unida y ha remarcado que hay que ser "pretencioso y arrogante" para querer convertirse en presidente siendo el líder de la tercera fuerza nacional.
Cataluña
El dirigente popular se ha referido, aunque brevemente, a Cataluña para subrayar que "el futuro no puede estar en manos de una minoría que intenta conseguir ilegalmente la destrucción de nuestro país" y emplazar a Iglesias a aclarar si "están de acuerdo en fracturar España en pedazos y en que eso lo decida una parte de los españoles excluyendo al resto". "Fracturar la soberanía nacional es un de los peores negocios que puede hacer un país", ha añadido.
Además, Hernando ha lanzado otros zascas al candidato. Por ejemplo, le ha preguntado qué opina su portavoz en el Senado, Ramón Espinar, de su afirmación de que no se puede "especular con la vivienda" o en "qué categoría de derechos" de la mujer sitúa su frase de "azotar hasta que sangre" a una periodista.