Pedir lo imposible. El alcalde accidental de Barcelona, Gerardo Pisarello, apuesta por repartir los turistas por toda Cataluña, ante la masificación de la capital autonómica, al tiempo que ha negado que haya turismofobia en la ciudad.
El drenaje del turismo hacia el área metropolitana y otras provincias catalanas es la propuesta de Pisarello para que sea sostenible, según ha declarado en una entrevista del 324 recogida por Europa Press este domingo.
El precio del alquiler
En esta línea, ha argumentado que Barcelona tiene que utilizar “su imagen de capital turística para promocionar el turismo en Cataluña, en el resto del país”. Y, aunque considera injusto el término turismofobia, sí reconoce que la masificación genera malestar en determinados barrios por la gentrificación.
“La cuestión es encontrar el equilibrio para que esto sea sostenible, y pasa por una lucha muy decidida por acabar con los pisos turísticos ilegales”, ha aprovechado Pisarello, que ha citado a Airbnb.
El turismo es, además, una de las causas que han disparado los precios de la vivienda en Barcelona en muy corto espacio de tiempo. Ha asegurado que el ayuntamiento usa “todas las herramientas” para frenar la situación, pero que la regulación depende del Gobierno central. Por ello, ha pedido a las formaciones que presionan al consistorio que hagan lo mismo en el Congreso.
El referéndum
Por otra parte, Pisarello, ha pedido "preservar la seguridad de los funcionarios" en el referéndum anunciado por el Govern, ya que son los que tienen el "papel más delicado" y a la vez clave para garantizar la "imparcialidad" de la votación.
"Ojalá" el Gobierno de la Generalitat pueda garantizar un "referéndum efectivo y con garantías" y ha asegurado que, si ése es el caso, el Ayuntamiento de Barcelona "estará ahí".