El tono presidencial utilizado por Oriol Junqueras en la XXXIII Reunión del Círculo de Economía, así como la reacción de los empresarios que siguieron su discurso, han demostrado que algo se mueve e Cataluña.
El vicepresidente de la Generalitat ha intervenido hoy en estas jornadas que se celebran en Sitges (Barcelona). Lo ha hecho sin papeles --el presidente Carles Puigdemont le precedió ayer con un discurso leído--, tanto en catalán como en castellano y bajo el título Política y economía en Cataluña.
La presencia de Junqueras en estas jornadas económicas ha levantado una gran expectación, principalmente porque el dirigente independentista está llamado a ser, según las encuestas, el futuro presidente de la Generalitat. Para algunos empresarios consultados por Crónica Global, el vicepresidente económico se enfrentaba a un auditorio hostil. Otros ya preveían que su intervención despertaría mucho más interés que la de Puigdemont, de quien los asistentes, hartos del procés, desconectaron ayer de una forma muy ostensible: solo una persona le formuló una pregunta. Un desprecio sin precedentes en esta cita económica.
"Juzgadme con simpatía"
“Juzgadme con simpatía”, ha pedido Junqueras a los asistentes, consciente de las expectativas despertadas, que se canalizaron, en su caso sí, mediante la formulación de varias preguntas y peticiones del público. Entre ellas una salida política y dialogada al embrollo del procés.
Expresaron los asistentes el temor a que Cataluña independiente salga de la UE. “Somos partidarios de una Europa más unidad, más fuerte, de un tesoro común que sostenga una política monetaria común. Somos europeístas absolutamente convencidos y a las instituciones europeas les consta. No hay ningún mecanismo legal europeo, ningún título, ningún artículo, ningún tratado que prevea la expulsión de un miembro. Solo hay una vía posible, que es a petición propia”.
En este sentido, se ha mostrado vehemente: “No vamos a pedir aquello que no queremos, imposible, no le conviene a nadie. Tranquilidad absoluta. Nuestra voluntad es reforzar estas relaciones comunes”.
“Queremos la mejor relación posible con el Estado español... Y la mejor vía es la relación entre iguales, que disfrutemos de las mismas competencias e instrumentos. Somos conscientes de la importancia de los vínculos con el pueblo español, comercial, lingüístico, históricos... Como la deseamos con otros países. Deseamos que a España le vaya lo mejor posible. Y creemos que los españoles desean lo mismo para Cataluña”.
Se ha mostrado comprometido con una “sociedad catalana abierta, inclusiva y plural”, así como la “riqueza lingüística existente”.
Referéndum y FLA
Respecto al referéndum, ha dicho que “estamos abierto a hablar y, por eso, el mejor modo es dejar que los ciudadanos hablen. De lo contrario, podría parecer que nuestro compromiso con el diálogo no es muy sólido. En democracia, eso se hace votando. ¿Cómo vamos a renunciar a respetar a nuestros ciudadanos que tienen derecho a expresarse?”.
Junqueras ha destacado su voluntad de ser educado y tener una relación cordial con el Gobierno español, pero “no siempre es útil”.
Los empresarios también se interesaron sobre los 9.500 millones del FLA (Fondo de Liquidez Autonómico) que Cataluña deberá devolver al Estado y la baja clasificación de Cataluña en las agencias de rating. El número dos del Ejecutivo autonómico asegura que la economía catalana es capaz de “situarse en los mercados, gestionar nuestras responsabilidades lo mejor posible” y hacer frente a esos retos.
"Musculatura económica"
Tras abordar el reto de la digitalización, donde Barcelona se ha convertido en un importante polo de atracción, así como el gran potencial de los puertos catalanes, Junqueras se refirió a la situación de las personas en situación más vulnerable. Ha asegurado que buscar mecanismos que garanticen la justicia social es una prioridad del Govern.
Ha hablado de las buenas perspectivas de crecimiento de la economía, muy diversificado, con el sector industrial como punta de lanza (un aumento del 5,2% en 2016) y un “récord histórico” de inversión extranjera directa y de exportaciones. El año pasado, el PIB catalán creció un 3,5%. Al respecto, ha negado la existencia de deslocalizaciones.
Junqueras calcula que podría finalizar 2017 con un PIB de 233.000 millones de euros. “Necesitamos musculatura económica y estructura fiscal sólida para afrontar el Estado del Bienestar”, ha explicado el líder de ERC, quien ha aludido al esfuerzo de la Generalitat en el ámbito educativo y sanitario.