La alcaldesa de L'Hospitalet de Llobregat y secretaria adjunta a la primera secretaría del PSC, Núria Marín, está al mando de un partido que va camino de cumplir 40 años al frente del consistorio. Toda una vida democrática. La heredera del mandato de Celestino Corbacho desde 2008 asegura a Crónica Global que no tiene miedo a la hora de encarar un futuro que estará marcado por el recientemente aprobado –y polémico-- Plan Director Urbanístico.
- ¿Por qué sí al PDU?
- Es una mejora para la ciudad y para el Área Metropolitana de Barcelona. No es un proyecto local, es una proyección económica a nivel general. También es una mejora para los ciudadanos por la obtención de un parque de 30 hectáreas que en estos momentos, juntando todos nuestros parques, no tenemos. Un tercer elemento es el desarrollo de un clúster biomédico.
- Habla de zona verde, pero el PDU afectará al último espacio agrícola de L’Hospitalet.
- Al revés. Ahora es una propiedad privada que no puede ser utilizada por los ciudadanos. Un espacio donde se cultiva porque los propietarios así lo quieren, pero no es garantía de que esto se mantenga en el tiempo si no es porque pasa a manos públicas. Es lo que el PDU permite: obtener este espacio para la ciudadanía, pasarlo a propiedad municipal y habilitar las tres masías que en este momento están en una situación muy degradada.
- ¿Dará trabajo a los vecinos?
- Estamos generando oportunidades para que los ciudadanos de L’Hospitalet se aprovechen en primera instancia. Pero en una zona económica donde está previsto que como mínimo puedan trabajar 20.000 personas, muchas serán de aquí y otras, no.
- El plan contempla 26 nuevos rascacielos y los vecinos, sobre todo de Bellvitge, no quieren más.
- Al contrario. La Asociación de Vecinos de Bellvitge no se ha quejado nunca de la construcción de ningún edificio del PDU.
- ¿Y los que sí se quejan?
- No sé exactamente de qué se quejan. Lo que sé es que hay algunas propuestas que son no hacer nada. Lo puedo respetar, pero no estoy de acuerdo en no transformar un millar de metros cuadrados de nuestro territorio que tiene muchas potencialidades y que hemos de aprovechar. El ejemplo más claro es el desarrollo de la plaza Europa. No es lo mismo tener chatarreros que tener actividades como las que tenemos en estos momentos.
- ¿La plaza Europa está a medias?
- No. No hace falta que te lo diga yo, puedes comprobarlo tú misma. Plaza Europa es un espacio que se ha ido desarrollando en medio de una crisis económica muy grande y que, pese a ello, hoy es una realidad. Faltan algunos edificios de vivienda privada, es lo único que está pendiente de desarrollarse, pero el 85% de la plaza Europa está finalizado y ocupado.
Núria Marín explica a los medios el Plan Director Urbanístico (PDU) / CG
- ¿Mantienen conversaciones con algún hotel interesado en aterrizar en L’Hospitalet?
- No. Todavía no.
- ¿Tiene miedo de que haya un fenómeno de turistificación como está pasando en Barcelona?
- No. Tenemos un turismo muy vinculado a dos sectores: negocios y deporte. No está generando ningún problema a los ciudadanos. Nosotros queremos aprovechar todavía más este turismo para que se integre en la ciudad y consuma más cultura, más gastronomía y más comercio en L’Hospitalet.
- La persecución de pisos turísticos ilegales en Barcelona está desembocando en una fuga a L’Hospitalet. ¿Se perseguirán?
- A diferencia de Barcelona, que ha hecho una moratoria general turística, nosotros hemos hecho una moratoria selectiva y, por tanto, hasta de aquí a un año aproximadamente no tendremos decidido cuáles serán las regulaciones. Entendemos que la convivencia en un mismo edificio de piso destinado al turismo y piso destinado a vivienda habitual puede crear problemas y hemos parado la realización de este tipo de establecimientos. Ahora hemos de pensar con tranquilidad.
- Existe la creencia de que L’Hospitalet acoge todo lo que Barcelona no quiere.
- Acogemos lo que nos interesa, son oportunidades que aparecen en la ciudad y, si coinciden con nuestro proyecto, facilitamos su aterrizaje en la ciudad. Si no, dejamos que pase a otro sitio. Hay muchas propuestas sobre la mesa que no encajan. No estamos esperando a que alguien diga que no para nosotros decir que sí.
Núria Marín, alcaldesa de L'Hospitalet, frente al Palauet de Can Boixeres / CG
- Su grupo va camino de cumplir 40 años al frente del consistorio de L'H. ¿Tiene miedo de que los podemitas ganen terreno?
- No, sinceramente. Los ciudadanos son inteligentes y escogen cada cuatro años un equipo de gobierno que entienden como el mejor para defender sus intereses. Evidentemente, las cosas van cambiando y la política también. Nosotros tenemos el aval de 40 años en una ciudad que estaba destinada a ser un suburbio y que hoy es una ciudad emergente. A partir de aquí, los ciudadanos escogerán. Yo no tengo miedo.
- ¿El procés les ha afectado en una ciudad históricamente no independentista?
- Nos ha afectado a todos. A veces, en lugar de trabajar juntos en desarrollar este país hacia una sociedad más fuerte, nos hemos enredado en un tema que no sé cuándo acabará, ni si acabará, pero yo he echado de menos que paralelamente se estuviera trabajando en el día a día. Lo hemos hecho desde los municipios, muchas veces en soledad, y esa es una queja que yo he manifestado pública y privadamente, también a los responsables políticos de otras administraciones.
- ¿Ha sufrido alguna represalia por parte de la Generalitat?
- Represalias no; ha habido etapas de buena relación institucional y etapas de una relación prácticamente nula. En estos momentos, tenemos una buena relación con el presidente de la Generalitat y estamos satisfechos de que se haya decidido trabajar en paralelo al proceso independentista con las ciudades.
- ¿Qué hace mal el equipo de gobierno de Núria Marín?
- Hay que mejorar muchas cosas, soy muy crítica y autocrítica. Una de ellas es mejorar la convivencia y el civismo en la propia ciudad. No depende exclusivamente del consistorio, es un pacto de todos y estamos ocupados en eso.