El juicio del caso Adigsa --la presunta trama de corrupción de CDC que vio la luz tras la famosa interpelación del 3% realizada por Maragall a Mas en febrero de 2005 en el Parlament-- se ha suspendido hasta el día 16 de mayo.

La causa del aplazamiento ha sido un error en el proceso de notificación a dos testigos de su acta de comparecencia a juicio.

Antes de constatar el error, todas la partes implicadas en el caso, incluida la fiscalía, han estado negociando un posible acuerdo para evitar la celebración del juicio.

Pacto sin Salguero

Todos estaban por la labor, menos José Antonio Salguero, el constructor que hace 12 años compareció ante la fiscalía y reconoció que tuvo que pagar para obtener contratos publico de la empresa de la Generalitat Adigsa.

El fiscal le pide dos años de cárcel, pero Salguero quiere que se haga justicia y no acepta un eventual pacto que deje libres a los mandatarios de la empresa pública, para los que la fiscal pide inicialmente entre 9 y 10 años de cárcel.

Al no llegar el acuerdo y cuando el juicio se iba a iniciar, el tribunal se ha percatado del error en la citación de estos dos testigos, y ha decidido la suspensión.