El presidente catalán, Carles Puigdemont, empieza el fin de semana con visible buen humor y con una nueva advertencia al Estado. El apoyo de la CUP a los Presupuestos, dice, es una "mala noticia" para el Gobierno español. Un Ejecutivo que, opina, "llegará tarde y mal o no llegará" a la operación diálogo.

Puigdemont ha valorado la respuesta de la CUP en un acto del PDECat. "Podremos tirar adelante la parte final de la legislatura", ha celebrado.

Todo comenzó con el Estatut

El presidente autonómico ha recordado que el actual procés comenzó hace casi siete años, "con la humillación colectiva por la sentencia contra el Estatut". Desde entonces, asegura que se han superado "todas las pruebas de estrés", "cada año, cada prueba, con buena nota".

Este camino ha sido de constante aprendizaje, según el político. "Tenemos que tenerlo claro ahora que llegamos al final del proyecto", ha argumentado, tras agradecer "el mérito del Govern que asumió los riesgos y dio la cara", en referencia al papel de Artur Mas y su equipo en el procés. "Estamos a punto de superar la prueba definitiva con más fuerza de la que nuestros adversarios pueden imaginar".

El juicio a Mas

Por todo ello, Puigdemont no acaba de creerse la puesta en marcha de la operación diálogo del Gobierno español. Hasta ahora, dice, el Estado solo ha respondido con "expedientes judiciales, o dossieres falsos, o usos de fondos reservados para engordar las cloacas".

"El 6 de febrero, el Estado tiene que notar el aliento de los catalanes", ha expresado en relación al juicio a Artur Mas por el 9N. En esta ocasión, el Govern sí corresponderá a la "invitación de diálogo en los juzgados": "Nuestra voz se escuchará alta y clara y desde el primer momento". El diálogo, dice, entra ya "en tiempo de descuento".

Junqueras, escueto

Escueto ha sido el mensaje del vicepresidente de Cataluña, Oriol Junqueras. "¡Seguimos y seguiremos! ¡Ahora, referéndum!", ha escrito en Twitter.

Òmnium, por su parte, ha apostado por que la campaña del sí en vistas al referéndum que el Govern prevé celebrar este 2017 comience en abril y aglutine "a todos los demócratas y al soberanismo".

Sin impedimentos legales

El presidente de la organización, Jordi Cuixart, ha mantenido que "el gran consenso de país se llama referéndum y la prioridad de la entidad es ganarlo y construir la República catalana": "Se pondrán todos los recursos de la entidad al servicio del referéndum".

El portavoz del Pacte Nacional pel Referèndum, Joan Ignasi Elena, ha cerrado la asamblea de Òmnium defendiendo que "no hay ningún impedimento legal que imposibilite el referéndum" y ha añadido que, si no se celebra, será por una decisión política.