Oficial. La CUP aprueba los Presupuestos catalanes de 2017, pero en modo condicional. La formación anticapitalista critica el contenido de los mismos, aunque entiende que es la única manera de forzar al Govern a la convocatoria del referéndum. Es el último “chantaje” del Ejecutivo al partido independentista.
El secretario nacional de la CUP, Quim Arrufat, ha denunciado hasta “tres chantajes” del Gobierno autonómico en el correcalles hacia la independencia, como la exigencia de JxSí de que gobernase Artur Mas. O la aprobación de los Presupuestos de 2017 para impulsar el referéndum.
Por el bien de la consulta
“Ya está bien de chantajes, que no hacen ningún bien al referéndum”. En cualquier caso, el apoyo a las cuentas tiene fecha de caducidad, según ha recordado en una comparecencia junto a la diputada Eulàlia Reguant en Vilafranca del Penedès (Barcelona), donde el consejo político de la organización ha dado el visto bueno a las cuentas con 39 votos a favor, 22 negativos y 2 abstenciones.
En este sentido, Arrufat ha admitido: “El voto favorable no es por el contenido social [de los Presupuestos], que no compartimos, sino para dejar vía libre a la celebración del referéndum y construcción del proceso constituyente”.
Septiembre, como muy tarde
Por todo ello, en el debate final de Presupuestos, la CUP dará dos votos a favor y ocho abstenciones, los necesarios para que salgan adelante.
“Es un sí condicional con fecha de caducidad […] Si no hay referéndum, la CUP retira el apoyo al Gobierno y provocará la convocatoria de elecciones”, ha añadido. Daría así por “terminada esta fase del proceso”.
La petición de la CUP va más allá. Exige al Ejecutivo de Puigdemont que el referéndum “tiene que estar preparado incluso antes del verano”. En mayo. “No podemos permitirnos otro 9N, con la mayor parte del trabajo por hacer”. La consulta debe realizarse, ha matizado Arrufat, cuando el tiempo político del Estado lo permita.
No son los presupuestos sociales
Antes que Arrufat ha hablado la diputada del Parlament Eulàlia Reguant. Ella ha criticado con dureza que “estos Presupuestos no hacen un esfuerzo real distributivo ni abordan las políticas sociales de manera directa”. “No son los Presupuestos que necesita el país”, ha sentenciado.
Es por ello que Reguant prevé y entiende “la indignación de los colectivos, movimientos y ciudadanía que luchan por unas condiciones dignas”.
Todo sigue igual
En los Presupuestos "sí se salvan 1.300 millones de euros, pero no es por un esfuerzo del Gobierno por aumentar ingresos o mejorar políticas; son fruto de un cambio de dinámicas económicas", ha valorado. Porque el Govern hace "la misma política de privatización y privilegios que se ha mantenido en 35 años de sistema autonómico".
"La CUP ha hecho un esfuerzo para sintetizar las necesidades del país, para ver de dónde se podía quitar dinero y dónde se podía poner. Planteábamos reducir salarios de altos cargos para destinarlos a renta mínima, reducir partidas de externalizaciones para revertir privatizaciones, reducir conciertos educativos para mejorar la educación pública". El Govern "no ha respondido de manera adecuada a lo que se necesita", ha concluido.