El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, prometió anoche un referéndum "vinculante y válido", que persistirá en negociar con el Estado, para que el año 2017 sea "el inicio de la era de la Cataluña rotundamente libre".
En el teatro Romea de Barcelona, Puigdemont ofreció una conferencia para hacer balance de su primer año como presidente y trazar las líneas de 2017, en un acto al que asistieron consejeros y dirigentes del PDECat y ERC.
"Ya se está consiguiendo"
El presidente catalán dijo que ya se está "consiguiendo" la independencia con los pasos que individualmente y colectivamente está dando la sociedad catalana, pero subrayó que este 2017 el Govern "garantizará" que los catalanes puedan decidir "en un referéndum que será vinculante y válido", puesto que son los ciudadanos los que "autorizarán el referéndum con la participación".
"Los ciudadanos, haciéndoselo suyo, lo harán rotundamente válido aquí, en todo el mundo y en la UE, que debe hacer honor a su tradición de servicio a la paz y a la democracia", añadió.
Las negativas de Madrid
En todo caso, "no renunciará" a negociar la consulta con el Estado ni "dará por aceptado el primer ni el segundo no". "No se lo pondremos fácil tampoco a decir que no".
Para Puigdemont, en 2017 "se acabará" el proceso soberanista y se iniciará "una nueva era en la historia", la de una Cataluña "rotundamente libre, más próspera y más justa", en la que los catalanes "tomarán la voz".