El proceso secesionista ha proscrito la conmemoración del Día de la Constitución bajo la premisa de que la Carta Magna encorseta las aspiraciones soberanistas de Cataluña. “Nada que celebrar”, aseguran las formaciones independentistas, dispuestas a abrir las dependencias municipales en aquellas ciudades donde gobiernan. A modo de ejemplo, la CUP ya ha anunciado que sus 20 alcaldes no cerrarán las puertas de sus respectivos consistorios el 6D.
Por el contrario, el Ayuntamiento de Rubí (Barcelona), cuya alcaldesa es Ana María Martínez (PSC), ha decidido celebrar oficialmente esa festividad mediante la lectura de varios artículos de la Carta Magna en un acto que tendrá lugar a las 10 horas en la plaza del ayuntamiento. En el mismo participarán concejales del PP y Ciudadanos, de forma que podrá visualizarse un frente común constitucionalista que, según el portavoz del grupo municipal del partido naranja, José Abadías, “debería hacerse extensivo a otros ámbitos políticos”, como es el caso del Parlamento catalán.
La iniciativa es el resultado de una moción municipal en la que se instaba al ayuntamiento de esta población de 74.000 habitantes a organizar una celebración “solemne” el Día de la Constitución, así como promover y difundir los actos que se lleven a cabo esa festividad “para que las asociaciones y entidades de distintos ámbitos que lo deseen puedan participar, así como cualquier ciudadano a título individual”.
Fruto del consenso
Según indica la moción aprobada, el 6 de diciembre se conmemora el nacimiento de la Constitución Española de 1978, “que fue el fruto del consenso entre diferentes posiciones políticas que habían estado enfrentadas históricamente y por tanto entre las distintas ideologías existentes en España. Es precisamente ese espíritu de consenso el que nos trajo la democracia”.
La iniciativa municipal insta a ensalzar la "labor de las distintas fuerzas que en un momento difícil para el país supieron encontrar un equilibrio adecuado para el avance de la democracia y de la calidad de vida de todos los españoles”. Por ello, “es importante celebrar la democracia desde todos los ámbitos, pero especialmente desde el educativo para dar a conocer a los más jóvenes los logros que se consiguieron con nuestra norma fundamental y el sacrificio que muchas personas tuvieron que hacer para que se llevara a cabo la redacción y aplicación de la Constitución Española”.
En contra de la desobediencia
Los partidos impulsores de la moción recuerdan que “la sociedad catalana votó de forma masiva la Constitución, que obtuvo un gran apoyo popular muy superior al que se obtuvo en otras comunidades autónomas. Rubí, dicen, no puede quedarse al margen del reconocimiento de los "valores comunes que han permitido la construcción de nuestro Estado democrático y social, el proyecto común español y la pertenencia a la Unión Europea”. El texto subraya que la Carta Magna “es la garantía de que ningún partido político, Parlamento autonómico o cualquier otra institución, puede desobedecer la legalidad y, en consecuencia, la democracia, ya que las resoluciones judiciales y la soberanía popular son la norma de cualquier democracia”.