La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, ha criticado con dureza a su homóloga madrileña, Cristina Cifuentes, por mantener que la Comunidad de Madrid sufraga la sanidad y la educación de los andaluces.
Díaz ha juzgado "clasista" la postura de Cifuentes, y la ha calificado como "patriotismo de boutique". En su opinión, sus palabras se asemejan a las de "los rufianes de turno", en referencia al diputado de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, que llamó "cacique" a la presidente andaluza.
"Gravísima ignorancia"
La reacción de Díaz no ha sido la única dentro del PSOE. El portavoz de la comisión gestora socialista, Mario Jiménez, se ha mostrado "sorprendido" por la "actitud insolidaria" de Cifuentes, y le ha atribuido una "gravísima ignorancia". Jiménez le ha recordado que la financiación autonómica no consiste en "camiones cargados de dinero" dirigiéndose a Andalucía, sino en contribuciones individuales a través de la "estructura fiscal" y "los presupuestos".
Por su parte, el líder de Ciudadanos (C's), Albert Rivera, ha exigido "respeto" y "prudencia" a Cifuentes, y ha subrayado que la obligación de los políticos es "unir a los ciudadanos y no dividirlos". Más contundente ha sido el portavoz de C’s en el Congreso, Juan Carlos Girauta, que ha considerado "supremacistas" las declaraciones de la presidenta madrileña.