Los alcaldes de Celrà, Verges, Mieres y Viladamat han recibido una solicitud de información sobre la apertura de sus respectivos consistorios en la festividad del 12 de octubre. Los ediles Dani Cornellà, Ignasi Sabater, Enric Domènech y Robert Sabater, respectivamente, consideran “absurda” la petición y ignorarán la misiva.
Los alcaldes de los municipios de Celrà, Verges, Mieres y Viladamat, gobernados por la CUP, han recibido hoy una carta de Manuel Sánchez-Bustamante, subdelegado del Gobierno en Girona, en el que se les pide que acrediten si los consistorios permanecieron abiertos el 12 de octubre pasado, qué servicios se prestaron y si trabajaron empleados públicos. También reclaman la copia del acuerdo por el que se procedió a la apertura.
Quinto año consecutivo
Los antisistema explican que la apertura de estos ayuntamientos catalanes en la Fiesta Nacional no es una práctica nueva. En el caso de Celrà y Viladamat es el quinto año consecutivo que se lleva a cabo. “Siempre se ha hecho con absoluta normalidad y anunciándolo abiertamente”, explican en un comunicado, sin que nunca se haya recibido ningún tipo de advertencia ni amonestación. Por ello, añaden “sorprendería ahora esta petición si no fuera por el revuelo causado este año por la denuncia del PP de Badalona, que ha disparado nuevamente los engranajes del Estado para atacar la autonomía municipal y el movimiento independentista”.
Los cuatro alcaldes manifiestan su voluntad de continuar aplicando los acuerdos municipales por los que los respectivos ayuntamientos decidieron abrir el 12-O, “siempre respetando la libertad de opción del personal municipal”, y conminan la Subdelegación del Gobierno a “dejar de dilapidar sus recursos, que financiamos entre todos, en persecuciones ideológicas que denotan una clara falta de sentido del ridículo”.