Pedro Sánchez pasará el enésimo examen a su liderazgo en el PSOE este domingo, tras los resultados de las elecciones gallegas y vascas. La batalla en el socialismo español está abierta, pero un día antes el secretario general del partido ha intentado aparcarla públicamente y darse un baño de masas en la Fiesta de la Rosa del PSC, otra formación hermana que también vive tensiones internas, con un discurso en el que ha intentado poner el foco de la atención mediática en Podemos y Ciudadanos.
Más concretamente, en los “vetos cruzados” que mantienen Pablo Iglesias y Albert Rivera, “aquellos que vinieron a cambiar la política”, que “frenan el cambio político y la regeneración que necesita el país”.
Reivindicación de su gestión
Aplausos entre el público cuando Sánchez ha reiterado su negativa a abstenerse y facilitar la conformación de Gobierno por parte del PP. “La derecha nos pide abstención, pero el PSOE no lo hará. Nunca lo ha hecho en los tiempos difíciles de la democracia y ahora queremos ser la alternativa al PP”, ha manifestado.
Sánchez ha reivindicado que él se ha sentado a hablar con los nacionalistas y con el PP y que en marzo se lanzó a una sesión de investidura solo con los apoyos de Ciudadanos que fracasó por la negativa de Podemos. “La alternativa al PP es complicada, pero no intentarlo es imperdonable”, sentenció.
Primarias en el PSC
Sonrisas, aplausos y alguna petición en voz alta que el líder de los socialistas intentó apuntar. Ferraz había echado el resto en una jornada de reflexión en el País Vasco y Galicia donde las perspectivas para el partido no son precisamente optimistas.
En la primera fila, han seguido atentamente el discurso Miquel Iceta y Núria Parlon, el secretario general del PSC y la alcaldesa de Santa Coloma de Gramenet que se enfrentarán en un proceso de primarias que culmina en dos semanas.
Bromas cruzadas entre los dos políticos sobre la batalla de las camisetas que se ha vivido en la Pineda de Gavà (Barcelona), la sede histórica de la Fiesta de la Rosa catalana, donde las agrupaciones que apoyan a ambos dirigentes mostraban públicamente sus preferencias. Incluso las han intercambiado entre ellos --Parlon se la ha regalado, Iceta ha apuntado que él había pagado los cinco euros que cuesta la que ha preparado su equipo--. En cuanto a los discursos, el apoyo a Sánchez más directo lo ha recibido por parte del aún secretario general del PSC.