La primera ministra británica, Theresa May, prevé activar el Brexit sin someterlo a votación previa en el Parlamento. Según una información que publica el periódico británico Daily Telegraph, la jefa del Ejecutivo considera que los ciudadanos son los que han elegido, que “Brexit significa Brexit”.
Es por esto que no dará oportunidad a los defensores de la permanencia en la Cámara de los Comunes –480 de los 650 representantes –a detener el procedimiento de salida del Reino Unido de la UE. Los que se oponen a la marcha argumentan que el referéndum no era vinculante, por lo que el Parlamento debería votar sobre la cuestión.
Artículo 50
El Tratado de Lisboa de 2007, sobre el que se sustenta la UE, no es muy concreto con respecto a la posible salida de uno de los Estados miembros. En términos generales establece que el país que decida abandonar la UE tiene que hacerlo de acuerdo a sus requisitos constitucionales. El texto fue objeto de debate durante la campaña y todavía genera polémica en el Reino Unido en cuanto a la gestión del Brexit.