La Fiscalía del Tribunal Supremo considera que no hay indicios suficientes para iniciar una investigación penal contra el ministro del Interior en funciones, Jorge Fernández Díaz, por sus conversaciones con el entonces jefe de la Oficina Antifraude de Cataluña (OAC), Daniel de Alfonso. No obstante, encomienda a las fiscalías de Madrid y Barcelona que valoren si pudieron cometerse delitos de revelación de secretos y malversación de caudales públicos por otras personas en relación con estos hechos.
La Fiscalía del Supremo ha analizado las denuncias presentadas contra el ministro --que es aforado-- por prevaricación, revelación de secretos y malversación de caudales públicas.
A su juicio, del contenido de las conversaciones difundidas por el diario Público "no se desprenden indicios suficientes para iniciar una investigación penal por preconstitución falsa de pruebas, por prevaricación administrativa ni por los restantes tipos penales".