Las oposiciones de la sanidad catalana que han acabado en el juzgado por supuestas irregularidades inyectaron hasta 1,11 millones de euros en las maltrechas cuentas de la red pública. Los aspirantes a ganar una plaza estable en los hospitales y centros de atención primaria del Instituto Catalán de la Salud (ICS) pagaron hasta 53,25 euros por las tasas de examen.
En total, más de 21.000 personas de Cataluña y otras autonomías se inscribieron en las pruebas. Las tasas que pagaron oscilan entre los 19,20 euros de los exámenes para celador a los 53,25 euros que desembolsaron los aspirantes a un puesto de medicina familiar y comunitaria.
Ingresos extra
Un portavoz del sindicato CGT, que ha destapado las presuntas irregularidades, ha acusado al ICS de abrir plazas "sólo para ingresar dinero", ya que los 340 puestos abiertos cubren únicamente un 10% de las jubilaciones del año pasado.